jueves, 20 de mayo de 2010

mis animes favoritos (tomo II)

En el primer tomo hacía revisión de mis animes favoritos sin trama continuada o encadenada. En el segundo pasaré revista a las ‘telenovelas’ en dibujos animados, subgénero en que los japoneses son unos capos. Reitero, al igual que en la lista precedente, mi subjetividad en el discernimiento.

10. EL REY ARTURO (Entaku no Kishi Monogatari Moero Āsā) 30 episodios producidos entre 1979 y 1980 por Masayuki Akehi y Tomoharu Katsumata, tomándose ciertas licencias para recrear las andanzas del legendario rey Arturo. La historia principia con la invasión del rey Lavik a Camelot, obligando al rey Uther a entregarle su hijo al mago Merlín para que quede a salvo, quien a su vez entrega al recién nacido a una familia de granjeros para que lo críen. Pasan los años y el joven Arturo consigue extraer la espada Excálibur de la piedra y se convierte en rey, enfrentándose al cruel Lavik y a su ayudante, una hechicera llamada Medessa (que substituye a la legendaria Morgana en el entuerto). El anime contó con una segunda parte: El príncipe del caballo blanco (Moero Arthur: Hakuba no Oji) no transmitida en el Perú. La canción de intro en español de España decía: “El que sabe la verdad, el que sabe cómo actuar, es el rey Arturo. El que tiene la verdad, el que lucha por la paz, el rey es él. Con su espada va a luchar, y la corte va a ayudar, el rey Arturo... El es el rey Arturo, tan bueno, él lucha por la libertad”. Programado por América TV en las mañanas, recuerdo a Jessica, una ex enamorada, quien encontraba churrísimo al personaje.

09. HEIDI 52 episodios entre 1974 y 1977 producidos por Isao Takahata, Atsuji  Hayakawa y Masao Kuroda, corriendo el diseño de los personajes a cargo de Hayao Miyazaki. Basado en la novela homónima de Johanna Spyri —quizá la más famosa de la literatura helvética—, la historia trata de una niña que es enviada a los Alpes suizos a vivir con su abuelo, un gruñón ermitaño que poco a poco le irá tomando cariño a su nieta. El tema de intro dice: “Abuelito dime tú, por qué en la nube voy. Dime por qué huele el aire así, dime por qué soy tan feliz. Abuelito, nunca yo de ti me alejaré”. Programado por Panamericana a fines de la década de 1970 en el mismo horario dejado por Marco, teniendo el mismo efecto lacrimógeno en la audiencia.

08. GRAND PRIX 44 episodios elaborados por Rintaro entre 1977 y 1978. Trata sobre un piloto de carreras llamado Takaya Todoroki que sueña con participar en la Fórmula 1. En una competencia para principiantes, un desatino suyo ocasiona un terrible accidente y él, mientras se recupera en el hospital, jura nunca más volver a correr, sin embargo conoce a Niki Lauda, el famoso campeón mundial, que a lo largo de la serie aparecerá cubriendo su rostro con una máscara blanca —a propósito de sus quemaduras en el accidente de Nürburgring— quien lo anima a competir en la Fórmula 0, una nueva categoría con monoplazas más veloces que en la F1. Miembro del equipo Katori Motors y conduciendo una máquina especialmente diseñada para él, el ‘Todoroki especial’, lo curioso es que sea por el motivo que fuera, siempre terminaba perdiendo. Recién en el capítulo final, Takaya consigue ganar un Grand Prix.

07. MARCO (Haha wo tazunete sanzenri) 52 episodios elaborados por Isao Takahata en 1976. Basado en De los Apeninos a los Andes de Edmondo di Amicis. Obra cumbre de la animación nipona, al punto de que afirmaría de existe un antes y un después de Marco, nuestro amigo, quien acompañado por su chango Amenif —en otros lares se le conocía como Amelio—, parte desde Génova hacia la Argentina en busca de su mamá. Cada capítulo era una angustia pues parecía que ya la encontraba pero nada, la tía había partido de Buenos Aires a Bahía Blanca, de ahí a Rosario y, en el capítulo final, la encuentra en Córdoba, enferma y postrada en una cama (no en vano el nombre del anime en japonés es: Tres mil leguas en busca de mamá). Como la gran mayoría de mi generación, me sé de memoria la intro: En un puerto italiano... Panamericana anotó un golazo al pasarla a fines de la década de 1970. América intentó tener un éxito similar con Remi, el niño de nadie (le naki ko), pero este anime ambientado en Francia era tan melodramático como insufrible.

06. LADY OSCAR (Berusaiyu no Bara) 41 episodios producidos entre 1979 y 1980 por Tadao Nagahama y Osamu Desaki (el mismo de Cobra y Remi). Su nombre original es La rosa de Versalles, basado en el manga de Riyoko Ikeda. Ambientado durante el reinado de Luis XVI y la Revolución Francesa, Oscar es en realidad una mujer criada como un noble doncel debido a su progenitor, obseso por tener un hijo varón. Su habilidad con las armas le procuran una exitosa formación militar, llegando a formar parte de la guardia imperial. Oscar empezará a descubrir o a sentir su femineidad cuando se enamora de Axel Fersen —quien en la vida real fuera amante de María Antonieta— y luego, cuando toma conciencia que es una fémina en todo el sentido de la palabra, se entregará a André, su fiel lugarteniente, protagonizando una escena de desnudos en medio del bosque que de por sí causó conmoción en los espectadores peruanos de mediados de la década de 1980. Transmitido por Panamericana al igual que La Princesa Caballero (ribon no kishi), anime que tiene la misma premisa: una chiquilla criada como varón, pero aparte de ello carecen de otras similitudes.  

05. CAPITÁN RAIMAR (Uchu Kaizoku Kyaputain Harurokku) 42 episodios producidos entre 1978 y 1980 por Rintaro, basándose en el manga de Leiji Matsumoto. El capitán Raimar es un pirata espacial, de porte gallardo a pesar de la notoria cicatriz que surca su rostro. Su nave espacial es el Arcadia que guarda muchos secretos metafísicos, entre ellos el espíritu del constructor de la nave. Entre sus tripulantes variopintos hay una alienígena que se alimenta de alcohol y habla como borracha. La historia nos traslada a un futuro donde la humanidad, a causa de la paz y la estabilidad, se ha vuelto anodina y por ende es presa fácil de las valusianas, una raza extraterrestre de mujeres bellas pero malignas, lideradas por la reina Raflesia. El padre de Tadashi Daiba intenta hacerles ver a sus congéneres esta amenaza, pero es asesinado por una valusiana. Tadashi busca la ayuda de Raimar y la lucha contra las invasoras se traslada al espacio exterior. Capitán Raimar era transmitido por Panamericana los domingos por la tarde. En España y otros países de América Latina conocen a la serie como Capitán Harlock.                             

04. NAVE ESPACIAL (Uchū Senkan Yamato) 77 episodios producidos entre 1974 y 1981 por Leiji Matsumoto —el mismo de Capitán Raimar—, que le rinde homenaje al poderoso Yamato, el acorazado más grande de la Segunda Guerra Mundial, un orgullo nacional para los nipones. La historia nos ubica en el año 2199, el Yamato espacial cuenta solamente con un año calendario para partir hacia el planeta Iscandar, recoger el limpiador de Cosmos y retornar a la Tierra para descontaminarla de la radioactividad producida por el ataque de los malignos habitantes del planeta Gamilus, lo que obliga a los terrícolas a refugiarse en las entrañas del planeta. Una verdadera odisea espacial con ciertas reminiscencias a pasajes de la Biblia como el Yamato haciendo las veces de arca de Noé o la muerte del barbado capitán, quien se pasa la mayor parte en cama —de hecho agoniza a lo largo de la serie— observando nuestro mundo en el capítulo final como si se tratase de Moisés quien observa pero no llega a pisar la tierra prometida. Transmitido por Panamericana, al final de cada episodio una voz en off recordaba a los espectadores la cuenta regresiva, jugando con la angustia de si iban o no a cumplir con el plazo.

03. CANDY CANDY (Kyandi, Kyandi) 115 episodios elaborados entre 1976 y 1979 por Shun-ichi Yukimuro, basado en el manga de Kyōko Mizuki y Yumiko Igarashi. Amada y defenestrada por igual. Yo particularmente no pude evitar enamorarme de ella a mis tiernos nuevo años, embelesado por sus ojos verdes, sus bucles dorados y la voz acaramelada de la argentina Cecilia Gispert para América Latina. No creo que volviera a ser fanático de una serie televisiva como lo fui de Candy. No me la perdía por nada cuando Panamericana la transmitió por primera vez en el lejano 1981, los martes y jueves a las 6:30 de la tarde. Estuve tan prendado de ella que intenté dibujar cada una de sus historias, en un intento de capturarla, quizá poseerla en un pedazo de papel. Esta declaración, por supuesto, la hago hoy que me acerco a los cuarenta, de párvulo me habría callado por temor que me tildasen de cabro. Candy Candy fue el primer mahō shōjo que se vio por estos lares, el primer anime dirigido a mujeres y chibolos de gustos aframbuesados como yo. La historia es harto conocida —incluso para quienes juran que nunca han visto ningún episodio—, la niña huérfana, adoptada, que se le muere el primer amor al caerse del caballo, que se vuelve a enamorar de otro en un colegio británico, que se hace enfermera, que se va a vivir con un hombre sin estar casados (una adelantada) y al final ese hombre resulta siendo su protector y príncipe de la colina. Un melodrama macanudo que a nadie —ni siquiera a sus más fanáticas— le gustó el final. Incluso en Italia realizaron una segunda parte no autorizada donde Albert moría de una fiebre tropical en el África y Candy se quedaba con Terry, el favorito de todas, seguro culpable de las primeras calenturas en muchas chibolas.  

02. COBRA (Kobura) 31 episodios elaborados por Osamu Dezaki entre 1982 y 1983, basándose en el manga de Buichi Terasawa, quien a su vez se inspiró en el actor francés Jean-Paul Belmondo para concebir al personaje. Cobra es un filibustero inescrupuloso que recorre la galaxia en busca de las tres bellas hijas de un viejo pirata que ha tatuado en sus espaldas un mapa del tesoro. Lo inusual del anime era su alto contenido erótico, las féminas eran desnudadas sin ningún tapujo para beneplácito de la púber teleaudiencia. Nunca pude ver el capítulo final y sospecho que nunca lo transmitieron en el Perú. Programado en las tardes, luego en las mañanas muy temprano, llegó el momento en que los directivos de América TV decidieron cancelarla al percatarse de lo que estaban transmitiendo a la chibolada... sin embargo, ya era demasiado tarde.

01. ROBOTECH El único anime no elaborado en Japón, curiosamente encabeza esta lista. La serie consta de 85 episodios, producidos en 1985 en los Estados Unidos. Carl Macek adquirió los derechos de Chō Jikū Yōsai Makurosu, el anime original que contaba con 36 episodios y si bien se hace notoria la manufactura gringa, la serie nunca pierde su esencia nipona. Robotech cautivó a toda una generación no por sus escenas de combate sino por dramas cotidianos de sus personajes en la ciudad Macross, una plataforma espacial que flotaba a una distancia cercana de la Tierra. Si bien el protagonismo de Rick Hunter es marcado, debatiéndose entre el amor de la bella Lynn Minmei y la cerebral Lisa Hayes, las vivencias de Roy Fokker o de Max Sterling también se siguen con interés. Se adentraba también en el mundo de los temibles zentraedi, los invasores alienígenas, permitiéndonos conocer su idiosincrasia bélica y sus costumbres como la separación de ambos sexos. Como bien decía la publicidad de Retro, el extinto canal argentino de cable cuando la repuso en 2008: “Mientras luchan por salvar la Tierra, ellos cometen errores, discuten, pelean, se enamoran, mueren... después de todo son seres de carne y hueso. Robotech, la serie de animación con la que te hiciste adulto”. Finalizada la saga Macross, los productores idearon una segunda saga, la de la hija de Max Sterling y la zentraedi Miría, luego una tercera saga, pero ninguna tuvo el mismo impacto que la original. Robotech es de esos productos audiovisuales que no merecen extenderse más de lo necesario.

2 comentarios:

marco dijo...

Bueno, hay que separar novelas y cuentos de las "telenovelas" para las que como sazón e ingrediente natural de la misma es la cursilería al punto de llegar a la ridiculez que descartaría, no sólo por sus buenos temas sino por el tratamiento recibido, entre los que mencionas a Marco, El Capitán Raimar, Cobra, y Robotech. Otros animes que te recomendaría y que no tienen nada de telenovela son Evangelion y Lain.

Un abrazo,

inicomslink dijo...

En la de Super Grand Prix creo que ganó 2 veces, al final (que rebasó a un monoplaza americano) y otra en Japón (antes del Rally Safari)