Nicolas Ollero ha hecho hoy unas declaraciones en el Diario de Sevilla Digital, que como médico lo situa bastante bajo en cuanto a su calidad profesional. Es una lástima, porque se va a jubilar muy pronto, pero por otro lado, al fin y al cabo él pertenece a la 'vieja escuela'.
Lo más preocupante es que muchos jóvenes médicos, enfermeros, etc tienen una visión del usuario de salud bastante distorsionada. Piensan que el usuario de salud es una especie de miserable indigente al que ellos puede que les de por ayudar durante unos minutos. Y que ellos por supuesto lo saben todo, y el usuario de salud a parte de estar enfermo, no sabe nada. Grandes presunciones para colectivos que se creen poseer conocimientos científicos.
Si no fuera por que la vida es muy complicada, la historia se acabaría aquí. Pero también es cierto que los andaluces viven en una sociedad muy calamitosa y esto genera tensiones. Gente muy pobre y con poca educación grita, agrede e insulta (no sólo a los profesionales de la salud sino a la policía y a todo el mundo). Esto genera actitudes defensivas por parte de los que trabajan sobre todo en la pública (e incluso miedo muchas veces, esta es la verdad). Estas actitudes impiden que se trabaje y se intervenga a un nivel aceptable.
Aún así, en la privada se dan casos de abuso por doquier por parte de los profesionales. Y no hay un sistema que proteja tanto al usuario de salud como al profesional. Esa es la realidad. Pero de ahí a soltar el comentario soez del señor Ollero (soez por despreciativo, arrogante y ofensivo), de que 'el paciente exige mal' es ridículo. El que exige mal es porque no recibe una buena explicación. Y de eso sabemos todos que los profesionales de la salud, no saben mucho (me refiero a explicar).
Ya es hora de que la ciudadanía aprenda a ser responsable de sí misma, y exiga más educación para la salud, y se recaiga menos en matasanos, que viven a costa de engrosar las cuentas bancarias de la industria farmacológica.
Respecto a los comentarios que he recibido y mismo al comentar esto en el diario, me doy cuenta que todavía no se sabe nada de modelos de intervención en salud en Andalucía.
4 comments:
El comentario del Dr. Ollero es real como la vida misma. No hay mas que darse una vuelta por los centros de salud, no es dificil ver carteles tipo "Se ruega no pegar al medico", "Por favor no pasar hasta que se le avise". "Solo un acompañante por paciente" que son continuamente ignorados, pese a que este tipo de cosas aparecen en las oblicaciones del paciente. Tampoco es dificil escuchar amenazas y gritos a los medicos.
Para ser doctor hay que hacer un doctorado. Yo no sé si el señor Ollero es doctor. Eso lo pones tu ahí como si tu lo conocieras. Por otra parte creo que he sido explícito en corroborar que el abuso a todos los que trabajan con el público existe (y no sólo a los médicos como tu pones en tu mensaje). Pero creo que de lo que de aquí se trata es de tomar conciencia de cuál es el papel del profesional y cuáles son sus poderes y obligaciones. Que ni decir tiene que el gobierno debería de proteger más a los profesionales; sí. Pero educar a la gente es más barato y más seguro. Y no olvides, pacientes somos todos, de modo que tú también eres un cliente de los servicios de salud.
¿Educar a la gente es mas seguro y mas barato? Eso si que tiene gracia.
No no me considero cliente de los servicios de salud, en cualquier caso usuario, no veo al medico como un mero proveedor de servicios.
A todo esto, segun el rae doctor tambien es el medico, aunque no tenga el grado de doctor.
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