COMO DECIRTE QUE TE AMO
Por: Z. Schezard
Kinomoto
Sakura:
No tengo las palabras adecuadas para empezar
esta carta, nunca he sido bueno para expresar lo que siento, de eso ya te has
dado cuenta. Soy un lobo solitario, sin embargo, durante mi estancia en Japón
he aprendido muchas cosas, todo gracias a ti.
Me
enseñaste a preocuparme por los demás, no sólo a ver por mí, era tan egoísta.
Era. Ahora sé compartir.
Tampoco sé porque escribo esto, tal vez nunca
llegue a tus manos, esas mismas manos con las que sellaste las cartas y las
transformaste para llegar a ser la nueva dueña. Te lo mereces, luchaste tanto,
pusiste tu corazón en esa empresa y lo lograste, triunfaste.
Debo confesar que la primera vez que te vi
pensé que jamás llegarías tan lejos, como era posible que una niña le ganara a
uno de los descendientes de Clow Lee. Por algo Keroberos te eligió, tuvo fe en
ti y no se equivocó. Ahora tengo la seguridad de que aun sin mi ayuda lo
hubieras logrado, eres fuerte y posees una voluntad inquebrantable, virtudes
que admiro de ti, así como otras cosas.
Quiero decirte que lo que te dije esa noche a
las afueras del Templo es la verdad, me tomó tanto tiempo decidirme, aunque
debo confesar que Daidoji tuvo algo que ver. También me tomó tiempo darme
cuenta de lo que sentía y si me permites quisiera explicarte como fue que pasó.
Es algo que quisiera compartir contigo.
Al principio de esta aventura no eras para mi
más que otra chica compitiendo por lo mismo, lo único que me importaba era
obtener las cartas y volverme más fuerte, regresar orgulloso a casa, pero tu...
me trataste con una amabilidad que no merecía. Fui tan grosero contigo, me
avergüenzo por eso, discúlpame por favor. Además no sólo te consideraba mi
rival con las cartas, sino que llegué a pensar que también competíamos por una
persona. Esa persona. Si embargo, el día, o más bien la noche, en que atrapaste
la carta Regreso, mis sentimientos comenzaron a enredarse. Nadie me había
abrazado de esa manera. Los abrazos de mis hermanas y mi madre son tan diferentes,
hasta los de Mei Ling. Pero al sentir tus brazos alrededor de mi cuello, sentir
que te importaba, fue algo inexplicable. Por eso me desmayé, estaba totalmente
abrumado, por fortuna tu pensaste que había agotado mi magia. A partir de ese
día te empezaría a ver con otros ojos, aunque me negaba a aceptarlo. Eso fue
sólo el principio de lo demás.
Para mi desgracia, o fortuna, tú eres
distraída y no notaste todas las veces que me sonrojaba al verte o tenerte
cerca, Siendo Daidoji una niña muy observadora, fue la primera en darse cuenta
de mis reacciones y me lo hizo saber la primera vez que perdió su voz, pero soy
tan necio que lo negaba rotundamente.
Poco a poco las cosas se hicieron más claras,
no soportaba verte llorar y eso lo comprendí cuando perdiste tu reloj, aquel
que te regaló Esa persona, pues al sufrir tu, yo también lo hacía. Y cuando
enfermaste, no pude evitar el preocuparme, más sabiendo que te arriesgabas al
salir en esas condiciones, eres muy responsable.
Admito que de las cosas que más disfrute fue
la obra de la Bella Durmiente, ya te imaginarás como me sentí al saber que los
dos tendríamos los papeles principales. Esa vez si que estaba nervioso,
muchísimo. El simple hecho de imaginar que tendrías que besarme, aunque fuese
sólo una actuación hacía que la cabeza me diera vueltas. A veces me arrepiento
que esas cartas aparecieran y arruinaran el momento, pero otras, me alegro,
para así poder besarte, si me lo permites, sin actuar.
Que te puedo decir de la llegada de
Hiragizawa. Él fue uno de los motivos por los que me quedé en Japón, me ponía
celoso el que estuviera cerca de ti, pero aun no aceptaba la situación, que me
gustabas.
El día que fueron a comprar los materiales
para fabricar el osito de felpa, yo compré los míos también. En esos momentos no
entendía el motivo, era algo superior a mí, no sabía que me había impulsado a
hacerlo. Una vez que estuvo terminado, veía el pequeño rostro de aquel muñeco
gris y lo que se reflejaba era tu imagen, seguía negándome. ¿Porqué seré tan
testarudo y terco?
Además estaba confundido, ¿qué era lo que
sentía por Esa persona? Él me lo aclaró, me dejé deslumbrar por el poder de la
Luna. Ahora si podía ordenar mis ideas. Fue hasta entonces que admití lo que
sentía. Recuerdo mis palabras: Esa chica me gusta. También fue ese día en que
empecé a llamarte Sakura, y tu me llamaste Shaolan. Fue el día en que nos
quedamos encerrados en el elevador, mi desesperación fue tan grande al verte
caer, al creer que te perdía. Las palabras brotaron de mi garganta como señal
de impotencia. Pude respirar al verte subir, flotando, que no aguanté las ganas
de abrazarte, estaba feliz.
Ahora que había sido sincero, había un
impedimento para decirte lo que sentía, tu amabas a otra persona y no había
esperanza para mí. Cada vez que lo veías podía sentir como tu corazón brincaba
de emoción, mientras que yo solo podía verte feliz. Cuando te decidiste a
confesar lo que sentías, pensé que todo estaba perdido, sin embargo las cosas
no salieron tan bien. Lo único que podía hacer era consolarte, albergando la
esperanza de que algún día voltearas hacia mí.
Es aquí dónde interviene Daidouji, ella me
convenció para confesar lo que sentía, sin embrago cada vez que lo intentaba,
algo lo impedía, como aquella vez en donde Keroberos se interpuso y no pude terminar
mi misión.
Y por fin lo hice, no en un buen momento
confieso, pero si no lo hacía en ese instante, jamás te enterarías. Aun
recuerdo tu rostro al escuchar mis palabras, te quedaste inmóvil, mirándome con
esos ojos verdes, tan hermosos, ¿qué podrías responder? No te puedo obligar a
nada, eso sería injusto. Lo único que quería, ya lo hice. Sólo quería que lo
supieras.
Ahora que ya no hay problemas, ahora que
sabemos que Eriol es la reencarnación de Clow y que has cambiado las cartas a
Cartas Sakura, convirtiéndote en su dueña, mi trabajo en Japón ha terminado,
regresaré a Hong Kong.
Por eso me despido amada Sakura, deseándote
que seas muy feliz y que tus sueños se cumplan.
Siempre seremos amigos
N. A:
Espero les haya gustado, es mi primer fic realcionado con
Sakura. Tuve la ispiración para hacerlo una vez que me encontraba viendo por
enésima vez los capítulos de la segunda parte de la serie. Tal vez no sea una
idea muy original, pero a mi me gustó.
Si tienen algún comentario diríjanse a drizzle_fairy@hotmail.com