viernes, 13 de enero de 2006

Manual de ligoteo para dummies




Hacía tiempo que no me reía tanto. Será que ya he perdido la costumbre de ligar los sábados por la noche (y quien dice sábados dice jueves, viernes... e incluso martes, que también se puede), pero esto barrunta desastre. Seguro que entre mis lectoras hay alguna que ha tenido que someterse a la tortura de aguantar a un tío pesado intentando ligar toda una noche, con lo cual te acaban amargando las copas, las horas no pasan y, lo que es peor, el tío este no tiene intención aparente de desaparecer del horizonte en las próximas 4 horas. Conclusión: mejor me voy a mi casa y a este que le aguante su madre, si puede. Aunque lo mejor del caso no es eso, sino que todas tus amigas empiezan por reirse mientras piensan "jeje, que putada" pero poco a poco su cara va cambiando hasta reflejar una especie de "mira, o te lías ya con él y os largáis los dos, o le das una patada en la entrepierna y que se esfume".

A todo esto, el sujeto en cuestión te ha hablado ya de sus colegas ("los mejores colegas del mundo, tía, te lo juro"), de su trabajo ("una mierda, tía, en serio, sabes?"), de su coche ("16 válvulas, 40 cilindros, un TDI cupra, tía, una pasta"), de los Andy&Lucas ("deja de llooraaaaaaar, y sécateeesaslágrimillas de cristaaaaal...."), te ha regado la cara con salpicaduras de su DYC-cola y una de sus manos se balancea sospechosamente entre tu espalda y tus caderas, vamos que te tiene más sobada que el pan bregao. Por más que intentas escaquearte, siempre vuelve a aparecer, un poco más pesado, un poco más borracho y un poco más a saco. Y una ya no sabe si largarse a otro bar para que la deje en paz, si ir al baño y hacerse fuerte en él a modo de trinchera, o pasar de él directamente. No obstante, esta última opción es peligrosa, porque justo en el momento en que decides que te diga lo que te diga no piensas responder ni mirarle a la cara, ni tan siquiera molestarte en tratar de descifrar ese lenguaje rudimentario que escupen sus labios, justo entonces aparece la manada de amigos que van al ataque, misión: acoso y derribo. Uno te dice lo buen tío que es su colega ("no le ves, tía, que cara de bueno tiene?"), y otro se te acerca por el otro lado y te suelta eso de "que sí, tía, que mi colega es legal, que no veas que coche tiene...". Total, que te hablan todos a la vez y al final acabas por decirles a todos que sí, que muy majos, que el amigo es muy majo, pero que no te pone. Y ahí... la cagaste. Ahí es donde lo estropeas todo. Porque en el mejor de los casos, los amigos le dicen que no te gusta y le instan a enseñar los abominables (no, no es una errata, has leído bien, abominables), y el chico se anima y te hace una especie de baile a lo 9 semanas y media... que deja mucho que desear y sobre todo, hace que sientas vergüenza, propia y ajena. Propia por el corro que se ha formado a tu alrededor de gente que no sabe si reirse del sujeto o darte el pésame por el bochorno. Y ajena porque piensas en ese pobre chico cuando vuelva por el bar el próximo sábado y las camareras empiecen a sonreir nada más verle aparecer por la puerta.

Resumiendo, que hay mucho inconsciente suelto por estos mundos de Dios y no están las cosas como para hacer el ganso. Para todos aquellos que se sientan identificados con uno o más de los rasgos descritos con anterioridad, ahí van unos pequeños consejitos (desde el corazón y con la intención de que el ritual del flirteo nocturno mejore notablemente):

- A las chicas nos gusta que nos traten con cariño, con apelativos del tipo "princesa", "preciosa", "guapa", "niña"; no nos gusta que nos empalaguéis con dosis extras de azúcar del tipo "caramelito, bombón, diosa de ébano, etc."
- Nos gusta que nos habléis de que vivís solos; no nos gusta que nos detalléis las bolas estilo western que aparecen al abrir la puerta del baño.
- Nos gusta que nos digaís que tenéis coche propio; no nos gusta que nos detalléis lo que ha costado tunearlo, o los cilindros, porque, sinceramente, no entendemos nada.
- Nos gusta que nos invitéis a una copa, o dos; no nos gusta que tratéis de utilizar las dosis etílicas para emborracharnos y abusar de nosotras.

- Nos gusta que tengáis un trabajo estable; no nos gusta que nos déis el número exacto de cabezas de ganado que poseéis, ni la extensión de vuestros terrenos.
- Nos gusta que seáis sensibles, que tengáis corazoncito; no nos gusta que nos contéis todas las putadas que os hizo la ex, sobre todo si aún estáis enamorados de ella.
- Nos gusta que tangáis solvencia económica; no nos gusta que presumais de que los levi's que lleváis os han costado 30 dólares americanos y los comprásteis en una boutique en un viaje reciente a San Francisco para pasar la nochevieja, simplemente porque el plan de los amigos este año no va con vuestro karma.
- Nos gusta que tengáis sentido del humor; no nos gusta que repitáis durante 4 horas la perfecta imitación de Chiquito de la calzada.
- Nos gusta que seáis elegantes y bien parecidos; no nos gusta que parezcáis recién salidos de una revista de moda de Milán, estilo pasión de gavilanes.
- Nos gusta que toméis la iniciativa de forma sutil; no nos gusta que utilicéis el brazo que so sobra de sujetar la copa para rodearnos la cintura y refregarnos contra la cebolleta (no nos gusta nada).
- Nos gusta que nos saquéis a bailar una rumbita por aquello de romper el hielo; no nos gusta que os empeñéis en hacernos bailar al ritmo del techno una especie de pasodoble a lo "Paquito el chocolatero".
- Nos gusta que nos comáis la oreja (en sentido literal y metafórico); no nos gusta (nada) que nos metáis la lengua por el oído hasta casi tocarnos el cerebelo, y mucho menos que nos sorprendáis con un piropo del estilo de "tienes unos ojos que te comía tó el bacalao".
- Nos gusta que nos encontréis parecidos con alguien; no nos gusta que nos digáis "te pareces a la Angelina Jolie esa" mientras nos miráis el escote. Aunque os cueste creerlo, tenemos los ojos situados unos 30 centímetros más arriba.
- Nos gusta que nos reguéis el ego con frases ingeniosas como "bonitas piernas..."; no nos gusta que la frase termine con un "... a qué hora abren?".
- Nos gusta que nos acompañéis a casa para evitar que nos pase algo por el camino; no nos gusta que al llegar al portal insistáis en comprobar in-situ que las llaves que tenemos abren efectivamente la cerradura de nuestra casa. Ya no digamos nada de comprobar si debajo de la cama hay algún psicópata depravado.
- Nos gusta que nos digáis los bien que nos sienta una camiseta o unos vaqueros; no nos gusta que luego nos preguntéis si debajo llevamos braguitas o tanga... y mucho menos que preguntéis de qué color!
- Nos gusta que tanteéis el terreno; no nos gusta que a los dos minutos de entablar una conversación los prefuntéis si tomamos la píldora.
- Nos gusta que tengáis tema de que hablar; no nos gusta que la conversación se limite a "he bebido un poco pero controlo, tú tranquila, cariño". (¿Cariño? ¿Acaso hemos intimado lo suficiente como para que me digas eso?).


Lo dicho, que hacía tiempo que no me reía tanto. Por cierto, hoy el mérito no es sólo mío; la parte de inspiración se la debo a mi muso (Bigotes), que fué quien me propuso escribir sobre esto, pero la forma se la he dado gracias a las colaboraciones desinteresadas de algunos sujetos que donaron su saber y sensibilidad para tan alto fin. Y como siempre, hay excepciones; pero esas me las guardo para otro día...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

mi querida amiga Ana!!
hace ya semanas qu no se de ti, bueno pues desde que empezaron las fiestas.............me ha gustado mucho este articulo,ademas de gracioso, es muy cierto, y en muchas cosas me he sentido mu idenificada, na vez mas me ha enganchado la lectura......
bueno no se de que especalidad eres, por la webquest que hiciste supongo que de lengua o de ingles...
yo estoy haciendo la didactica de gegrafia e historia, la verdad es que no tiene mucho que ver con mi carrera pero como no habia ninguna mas acertada, pues me pusieron en ella..........
no se si tu aun has empezado ya esta parte o aun no, pero si no lo hs hecho seguro que estas apunto de comenzar las clases, espero que sean un poco más monótonas que las mias, porque no sé si es porque no es de mi especialidad, pero se me hacen un poco pesadas.......
bueno lo que te queria proponer es una cita, jeje, suena un poco raro no??? me refiero a que podemos quedar un día y tomar algo, y asi conocernos en persona un poco mejor, ya que por internet me has caido genial,seguro que en persona aun mejor..........
la verdad es que cuando me lo propusiste antes de navidad, me parecio una idea genial,y bueno como habiamos quedado para hablarlo despues de las fiestas, pues aqui estoy pa proponerte un encuentro,jejeje..
bueno lo dicho yo puedo quedar cuando quieras, no trabajo asique excepto cuando voy a clases y estudio tengo gran parte del dia libre, asique tu me cuentas como tienes tus horarios, y miramos a ver cuando nos viene bien a las dos y hacemos un hueco pa conocernos.......yo creo que es mejor comunicarnos por email si te parece bien, aqui tienes mi direccion, escribeme y te contesto:
laumararg@hotmail.com
un beso de tu amiga virtual
laura

Anónimo dijo...

Vaya..por fin me he dignado a entrar en tu blog..buenos consejos para los tíos, pero te digo algo..creo que es totalmente imposible encontrar un tío que cumpla todas esas características..aunque los hay que lo intentan eh?..un hurra por ellos!
Oye, en cuanto a lo del porsche me has dejado en ascuas..te lo han traido los Reyes Magos o no?jeje..
Bueno escritora, me piro a seguir estudiando que llevo toda la tarde de descanso..
Un bso,Tania