martes, 29 de septiembre de 2009

Timberland, Jeffrey Swartz y Birthrigth Israel


Timberland (textil y calzado) tiene cinco tiendas en Israel. Su presidente; Jeffrey Swartz que junto a su familia posee el 73% de la empresa es un conocido militante sionista que participa activamente en campañas de propaganda y recogida de fondos en favor de Israel. Preguntado por las consecuencias negativas que su actitud podía acarrearle a la empresa respondió: "Claro que sí. Pero se lo debo a mis hijos, a mi familia, a usted ya la nación de Israel." Él continuó diciendo, "El Padrino estaba equivocado cuando dijo:" esto no es nada personal, es sólo de negocios. "Esto es muy personal."

Jeffrey Swartz es miembro del comité de la Fundación Birthright Israel; organización financiada tanto por el gobierno de Israel, la Agencia Judía para Israel y ricos filántropos Sionistas incluido Charles Bronfman y Sheldon Adelman que ofrece a jóvenes judíos 10 días de turismo, fiesta y una buena dosis de adoctrinamiento sionista visitando Israel a gastos pagados.

Los viajes desean en gran parte fomentar el apoyo entre la joven diáspora judía por la continuada existencia de Israel como un “Estado judío” y asegurarse una nueva generación de defensores israelíes que puedan tomar las riendas de sus padres y abuelos.

Como respuesta a Birthrigth Israel se ha creado Birthright Unplugged que aunque enfocado a jóvenes judíos estadounidenses esta abierta a todo el mundo ofrece viajes a Israel y los territorios ocupados para comprobar de primera mano los devastadores efectos que la colonización sionista y la ocupación han causado sobre los palestinos en Cisjordania y dentro de lo que es ahora el Estado de Israel.

jueves, 24 de septiembre de 2009

Boicot al Estado de Israel

“Uno se acostumbra a que las cosas sean cada vez más difíciles, ya no se sorprende de que lo que era todo lo difícil que podía ser pueda ser más difícil todavía”, escribía J.M. Coetzee en su novela Desgracia.

Tras más de cuatro décadas de ocupación de Gaza y Cisjordania y 61 años después del comienzo de la Nakba (proceso de limpieza étnica que permite la creación del Estado de Israel sobre la expulsión de gran parte de sus habitantes palestinos originarios) nos encontramos ante una disyuntiva feroz.

Más dinero no significa mejor calidad de vida de la población ocupada. Más sensibilización sobre la situación no contribuye a modificar las posiciones oficiales de nuestro gobierno al respecto. Los esfuerzos actuales no mejoran la situación sobre el terreno. La mayoría de los instrumentos aplicados en los últimos años se han mostrado estériles e incluso desmovilizadores. Pese al aumento geométrico de la solidaridad y la cooperación, la situación puede calificarse como mero mantenimiento del status quo. Esto es, de la ocupación militar y la colonización del territorio.

El modo actual de relacionarse con Palestina, en el que las necesidades de la población ocupada son provistas por agencias extranjeras, con la mejor o la peor de las intenciones, eximiendo así a la fuerza ocupante de sus obligaciones ante el derecho internacional, debe ser revisado radicalmente.

Basta ya de colectas y caridad, de cajones de medicamentos, exposiciones de fotos y procesos de formación para la no-violencia bien lustrados por los euros de quienes no estrategizan para los palestinos, sino para sí mismos. Charlas, giras por Europa y flujos económicos que, llegando desde el extranjero, fosilizan unos líderes palestinos interesados en sí mismos y en la consolidación de sus organizaciones y estructuras, pertenecientes a la perversa “industria de la paz y la normalización con Israel”.

Se acabó la época de la sensibilización: ya nadie puede decir “no sabía lo que estaba pasando”. Se acabó la época de la solidaridad hacia el desarrollo económico y social. Palestina se cae en el “des-desarrollo” mientras los fondos destinados desde la comunidad internacional se convierten en la “externalización israelí de la gestión de la ocupación”.

Es hora de pasar a la acción, movilizar un instrumento de respuesta y plantear una confrontación en Europa que revierta alguna utilidad para los palestinos independientes, interesados en un proceso rupturista y de resistencia, ya sea civil —como todo indica— o militar —pese a sus evidentes y conocidas deficiencias en la práctica y experiencia y cuestionamientos éticos. La ocupación israelí sobre Palestina solo terminará cuando su coste se eleve de manera insoportable, en un planteamiento de poca originalidad.

Pero esa elevación de costes debe cambiar de foco. Debe dirigirse, de manera colectiva, hacia el estamento “colaboracionista” que, con base en el extranjero, legitima y plasma la ocupación sobre el terreno. Israel, uno de los ejércitos más poderosos del mundo, solo puede debilitarse a través de su imbricación en el entramado capitalista internacional. Las inversiones extranjeras en Israel deben resultar costosas. Las exportaciones, vergonzosas y encubiertas. Su modelo de economía colonial debe modificarse a través del consumo selectivo y la presión, en forma de sanciones, hacia su militarismo en el eslabón más identificable: el de las empresas que lo sostienen y se lucran de él.

La campaña de boicot, desinversiones y sanciones (BDS) al Estado de Israel es el instrumento que permite identificar y responder colectivamente contra uno de los esfuerzos a través del cual se segrega Jerusalén. La empresa francesa Veolia-Alstom ni ocupa directamente ni es israelí, pero con sus obras de construcción del tranvía de Jerusalén segrega población por encargo, anexiona territorio “de facto” y comunica las colonias en territorio ocupado con el centro de Israel. Veolia-Alstom colabora y gestiona la ocupación. Y Veolia-Alstom trabaja también en Europa. Aquí se hace vulnerable.

La campaña de BDS permite revertir la presión en un objetivo cercano, identificable, vulnerable. Permite trabajar en solidaridad con Palestina reforzando estructuras de movilización política doméstica que continúan poniendo en tela de juicio la estructura de dominación transnacional y corporativa que, no olvidemos, ha estado en el centro de todo movimiento de dominación colonial.

No es una campaña cómoda. Nadie la subvencionará. Ninguna agencia de cooperación apoyará ahora, a las puertas de la Presidencia española de la UE, este proyecto. Se organizará de manera activista o no se organizará.

Es hora de traer la guerra a casa. De cohesionar el movimiento, de retomar una movilización de cercanía que despierte la necesidad de actuar de manera efectiva y constante. De abandonar la caritativa iglesia de la solidaridad y el penitente sermón de la culpa.

En el Estado español, significa identificar los proyectos en los que trabajan Alstom y Veolia —como Trambesos en Barcelona— como un objetivo que cada ciudadano y cada organización solidarios con Palestina pueden colocar en el centro de la diana con creatividad a través de una multiplicidad de instrumentos de acción directa noviolenta y resistencia civil.

Alberto Arce, periodista y activista del ISM (Movimiento Internacional de Solidaridad), vivió e informó del último ataque israelí sobre Gaza. Fuente La Hiedra.

lunes, 21 de septiembre de 2009

La fiesta de Tel Aviv llega hasta aquí.




Naomi Klein

The Nation 20.08.2009






Cuando oí que el Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF, por sus siglas en inglés) se enfocaba, a modo celebratorio, sobre Tel Aviv, me avergoncé de Toronto, la ciudad en la que vivo. Inmediatamente pensé en Mona Al Shawa, una activista palestina por los derechos de la mujer que conocí en un reciente viaje a Gaza. Teníamos más esperanza durante los ataques, me dijo. Entonces, al menos creíamos que las cosas cambiarían.

Al Shawa explicó que mientras las bombas israelíes caían durante los pasados meses de diciembre y enero, los pobladores de Gaza estaban pegados a sus televisores. Lo que vieron, además de la matanza, fue un mundo que se alzaba indignado: protestas globales, hasta 100.000 personas en las calles de Londres, un grupo de mujeres judías en Toronto que ocupaban el consulado de Israel. La gente lo llamó crímenes de guerra, recordó Al Shawa. Sentimos que no estábamos solos en el mundo. Si los pobladores de Gaza sobrevivían, parecía que su sufrimiento podría ser el catalizador del cambio.

Pero hoy, dijo Al Shawa, esa esperanza es una amarga memoria. La indignación internacional se evaporó. Gaza desapareció de las noticias. Y parece que todas esas muertes –hasta 1.400– no fueron suficientes para que se hiciera justicia. Israel hasta se niega a cooperar con una misión de investigación de Naciones Unidas encabezada por el respetado juez sudafricano Richard Goldstone.

En la primavera, mientras la misión de Goldstone estaba en Gaza recopilando demoledores testimonios, el Festival Internacional de Cine de Toronto estaba haciendo las últimas selecciones finales para su sección de Tel Aviv, calculada para coincidir con el centenario de la ciudad israelí. Hay muchos que quisieran hacernos creer que no hay conexión entre el deseo de Israel de evitar el escrutinio de sus acciones en los territorios ocupados y los relucientes estrenos en Toronto. Estoy segura de que el codirector del TIFF, Cameron Bailey, lo cree. Está equivocado.

Durante más de un año, los diplomáticos israelíes han hablado abiertamente acerca de su nueva estrategia para contrarrestar el creciente enojo global provocado por el desafío israelí de la ley internacional. Argumentan que ya no es suficiente simplemente invocar a Sderot cada vez que alguien mencione Gaza. El reto también es cambiar el tema a tópicos más agradables: cine, arte, derechos de los homosexuales, enfatizar las cosas que comparte Israel con lugares como París, Nueva York y Toronto. Luego del ataque a Gaza, conforme aumentaban las protestas, le metieron el acelerador a esta estrategia. Enviaremos al extranjero a reconocidos novelistas y escritores, compañías teatrales, exhibiciones, le dijo Arye Mekel, subdirector general de asuntos culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, a The New York Times. De esta manera, muestras la cara más bonita de Israel, para que no piensen en nosotros solamente en el contexto de la guerra. Y el Tel Aviv de onda, cosmopolita –que durante todo el verano ha estado celebrando su centenario con fiestas en la playa en Nueva York, Viena y Copenhagen, patrocinadas por Israel, es el mejor embajador.

Toronto ya había tenido un adelanto de esta nueva misión cultural. Hace un año, Amir Gissin, cónsul general de Israel en Toronto, explicó que la campaña de la Marca Israel incluiría, según un reporte en Canadian Jewish News, una importante presencia israelí en el próximo Festival Internacional de Cine en Toronto, con numerosas celebridades del entretenimiento israelíes, de Hollywood y Canadá, prometió Gissin. Confío en que todo lo que planeamos hacer ocurrirá. Y así ha sido.

Seamos claros: nadie afirma que el gobierno israelí está a cargo, en secreto, de la sección dedicada a Tel Aviv en el TIFF, y que le susurra al oído a Bailey cuáles películas programar. El punto es que la decisión del festival de darle un lugar destacado, poniendo a Tel Aviv como una ciudad joven y dinámica que, como Toronto, celebra su diversidad, se ajusta a las declaradas metas de propaganda israelí. Gal Uchovsky, uno de los directores incluidos en la sección, es citado en el catálogo del festival diciendo que Tel Aviv es un refugio al cual [los israelíes] pueden huir cuando quieren olvidarse de las guerras y las cargas cotidianas.

En parte en respuesta, Udi Aloni, el maravilloso cineasta israelí cuya película Local angel se estrenó en el TIFF, envió al festival un mensaje en video, en el cual reta a sus programadores a resistirse contra el escapismo político y en cambio ir a los lugares adonde es difícil ir. Es irónico que la programación de Tel Aviv en el TIFF esté en una sección específica, esté en un reflector, porque celebrar esa ciudad de modo aislado –sin mirar a Gaza, sin mirar lo que hay del otro lado de los altos muros de hormigón, los alambres de púas y los retenes– oscurece mucho más de lo que ilumina. Hay algunas maravillosas películas israelíes incluidas en la programación. Merecen ser exhibidas como parte normal del festival. Merecen ser liberadas de este marco altamente politizado.

Fue en este contexto que un pequeño grupo de cineastas, escritores y activistas, incluida yo, redactamos la Declaración de Toronto: No hay Celebración Bajo la Ocupación (torontodeclaration.blogspot.com). Fue firmada por Danny Glover, Viggo Mortensen, Howard Zinn, Alice Walker, Jane Fonda, Eve Ensler, Ken Loach y más de mil personas. Entre ellas está el respetado director palestino Elia Suleiman, así como muchos cineastas israelíes.

Los contrataques –encabezados por el Centro Simon Wiesenthal y la extremista Jewish Defense League (Liga de Defensa Judía)– han sido predecibles y también ingeniosos. La afirmación que más se repite es que los signatarios de la carta son censores que llaman a boicotear el Festival. De hecho, muchos de los signatarios tienen programadas muy esperadas películas en el festival de este año, y no lo estamos boicoteando: nos oponemos a la sección del reflector sobre Tel Aviv. Más ingeniosa estuvo la afirmación de que al negarnos a celebrar a Tel Aviv como simplemente otra metrópolis buena onda, ponemos en duda el derecho a existir de la ciudad. (El actor republicano Jon Voight hasta acusó a Jane Fonda de apoyar a aquellos que buscan la destrucción de Israel.) La carta no hace eso. Es un sencillo mensaje de solidaridad, uno que dice: este año no tenemos ganas de celebrar con Israel. También es una pequeña manera de decirle a Mona Al Shawa y a millones de palestinos que viven bajo ocupación y estado de sitio que no los hemos olvidado.

sábado, 19 de septiembre de 2009

Universidad de Ariel expulsada del Decathlon Solar de Madrid


Alberto Arce
Rebelión

Tras una campaña discreta, quiero anunciar una victoria:

Quiero compartir con toda la red lo que ya es oficial: la UNIVERSIDAD DE LA COLONIA DE ARIEL ha sido oficialmente excluída del Decathlon Solar de Madrid.

Gracias a Alicia de Valladolid por conseguir el documento de confirmación. Gracias a la gente de Cataluña que hizo el blog, gracias a Santi González que gestionó la pregunta parlamentaria. Gracias a todos los que reenviaron la carta presionando al Ministerio y a la Universidad. Con fundamentación legal firme, buenas cartas y una estrategia adecuada es posible conseguir aliados y victorias como esta.

Ahora veamos si los medios lo recogen o deciden que pase sin pena ni gloria. Porque se ha conseguido y es una victoria de la campaña de Boicot.

Sindicatos del Reino Unido aprueban el boicot con una abrumadora votación.




Palestine Solidarity Campaign

En una decisión histórica, los sindicatos británicos han votado abrumadoramente a favor de comprometerse a montar un movimiento masivo de boicot, desinversión y sanciones contra Israel por una solución negociada basada en la justicia para los palestinos.

La moción fue aprobada en el Congreso Anual de 2009 del TUC en Liverpool hoy (17 de septiembre) por los sindicatos que representan a 6,5 millones de trabajadores en todo el Reino Unido.

Hugh Lanning, presidente de la Palestine Solidarity Campaign, dijo: "Esta propuesta es la culminación de una ola de mociones presentadas en las conferencias de los sindicatos este año, tras su indignación por la brutal guerra de Israel contra Gaza, y refleja el crecimiento masivo del apoyo a los derechos palestinos.
Estaremos trabajando con el TUC para desarrollar una campaña en masa para boicotear los productos israelíes, especialmente los productos agrícolas que hayan sido producidos en los asentamientos ilegales israelíes de Cisjordania"
.

La moción, además, pidió al Consejo General del TUC que ejerza presión sobre el gobierno Británico para poner fin a todo el comercio de armas con Israel y apoye las iniciativas para suspender el acuerdo comercial UE-Israel. Los sindicatos también son alentados a desinvertir en empresas que se benefician de la ocupación ilegal de Israel de Gaza y Cisjordania que lleva durando 42 años.

La moción fue presentada por el Sindicato de Brigadas contra Incendios. Los sindicatos más grandes del Reino Unido, incluyendo Unite, el sindicato del sector público, y UNISON, que representa a los trabajadores de los servicios de salud, votaron a favor de la moción.

La moción también condenó la declaración del sindicato israelí Histadrut apoyando la guerra de Israel contra Gaza, que mató a 1.450 Palestinos en tres semanas, y pidió que se revisen las relaciones del TUC con Histadrut.

Los sindicatos británicos se unen a los de Sudáfrica e Irlanda al votar a favor de emprender una campaña de boicot en masa como herramienta para llevar a Israel al cumplimiento del derecho internacional, y presionarle para que cumpla con las resoluciones de Naciones Unidas que promueven la justicia y la igualdad para el pueblo palestino.

Para leer los textos de la declaración del Consejo General y la moción del sindicato de Brigadas contra Incendios, clica aquí.

Fuente: El nido del cuco

jueves, 17 de septiembre de 2009

Recuerde a este bebé


Academico israelí pide el boicot

En el mismo estado de Israel voces valientes se atreven a pedir el boicot económico contra su propio pais.
El pasado viernes 28 de agosto un prominente académico israelí en Los Angeles, pedía un boicot económico, cultural y político contra Israel.
El Dr. Neve Gordon, de la Universidad Ben-Gurion en Beer Sheva, calificó a Israel de “estado de apartheid” y dijo que un boicot era “la única forma de salvar a Israel de sí mismo.”
Gordon añadió: “El boicot debería comenzar con los productos producidos en los asentamientos y si esto no es efectivo, entonces debería extenderse a las compañías que apoyan a los asentamientos.”
Él añadió: “Un boicot gradual en lo que respecta al contenido y las circunstancias no llevará a la destrucción del estado, sino que lo fortalecerá porque animará a Israel a devolver los territorios ocupados y alcanzar un acuerdo de paz con los palestinos, lo que a su vez llevará a la normalización de relaciones con muchos países árabes que cambiarán su postura hacia a Israel en la arena internacional.”
Gordon, que es profesor en Ciencias Políticas, dijo que la expresión “estado de apartheid” era la forma más adecuada de describir a Israel hoy en día.
“Unos 3,5 millones de palestinos y medio millón de judíos viven en áreas ocupadas por Israel en 1967,” dijo Gordon “y, sin embargo, estos dos grupos están sujetos a sistemas legales completamente diferentes. Los palestinos carecen de un estado y de muchos de los derechos humanos más básicos. En agudo contraste, todos los judíos -ya vivan en los territorios ocupados o en Israel- son ciudadanos del Estado de Israel.”“No es algo fácil para mí, como ciudadano israelí, pedir que se suspenda la cooperación con Israel,” añadió. “Las palabras y las condenas de la Administración Obama y de la Unión Europea no han dado resultado ni han llevado siquiera a una congelación de los asentamientos y mucho menos a una decisión de retirarse de los territorios ocupados.”
Gordon se convirtió en foco de atención en 2002, durante el asalto de Israel contra el complejo de la Autoridad Palestina en Ramallah, ya que fue uno de los israelíes que permanecieron al lado de Yasser Arafat. En 2003, él criticó públicamente al general de brigada de Paracaidistas Aviv Kochavi por su actuación.
Tras la publicación del artículo, el consul general de Israel en Los Angeles, Yaakov (Yaki) Dayan, envió una carta a la presidenta de la Universidad Ben Gurion, Profesora Rivka Carmi, en la que afirmaba que tales declaraciones podían ir en detrimento de la Universidad.
“Desde que el artículo ha sido publicado, he sido contactado por personas que se preocupan por Israel; algunas de ellas son benefactoras de la universidad,” escribió Dayan. “han llegado a amenazar con retirar sus donaciones a su institución. Mis intentos de explicar que una manzana podrida no debería afectar a centenares de investigadores han resultado inútiles.”
Extraído de Al-Manar.

El Parlamento brasileño recomienda congelar la entrada de Israel en su tercer mayor mercado de exportación


"Esta decisión es un golpe enorme para la economía de Israel y las relaciones exteriores", dice Jamal Juma de la campaña palestina "Stop the Wall".

La Comisión Parlamentaria Brasileña de Relaciones Exteriores y Defensa Nacional ha recomendado que el Parlamento no debe ratificar el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el Mercosur y el Estado de Israel hasta que "Israel acepta la creación del Estado palestino en las fronteras de 1967".

Esta decisión es un acto explícito de presión sobre el gobierno israelí a cumplir con el derecho internacional, y un rechazo de años de incesante lobby israelí, presionando a una votación para ratificar el acuerdo.

La Campaña Popular Palestina contra el Muro del Apartheid y el Comité Nacional palestino de Boicot, Desinversión, y Sanciones contra Israel(BNC) *, emitieron una declaración conjunta comentando la convocatoria del Parlamento de Brasil a la congelación del Acuerdo de Libre Comercio entre el Mercosur e Israel.

Esta decisión es un golpe muy duro para la economía de Israel y las relaciones exteriores. Plantea un obstáculo enorme para la promulgación del acuerdo, que desde su firma en 2007 se ha estancado debido a la falta de ratificación por los países miembros del Mercosur. El Mercosur es uno de los mercados de más rápida expansión y la quinta economía más grande del mundo. Las exportaciones israelíes al Mercosur ascendieron a casi 600 millones de dólares en 2006.

Israel ha invertido fuertemente en el impulso para el acuerdo, centrándose en particular en Brasil, la mayor economía del Mercosur y el más poderoso actor político. Brasil solo, incluso sin un TLC, es el tercer destino más importante de Israel a la exportación. En 2005, Ehud Olmert, el ministro de Comercio de la época, viajó a Brasil para obtener el apoyo del Presidente Lula para el acuerdo. Hace poco más de un mes, el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Avigdor Liberman, viajó a Brasil para instar a la ratificación del acuerdo.

Desde el comienzo de las negociaciones del TLC, las cumbres de la sociedad civil del Mercosur han rechazado el acuerdo comercial. En nombre del Comité Nacional Palestino BDS (BNC), la Campaña base de los palestinos contra el Muro del Apartheid han trabajado junto a intelectuales, movimientos sociales, partidos y políticos brasileños para bloquear la ratificación del TLC. El Frente para la Defensa del pueblo palestino y el Frente Parlamentario en contra de la ratificación del TLC se formaron para apoyar el pedido de los palestinos contra el TLC. En enero una carta del BNC fue entregada al presidente Lula.

Como resultado de ello, la Comisión acordó escuchar a una audiencia pública ante el proceso de votación del pasado jueves 10.

Daniel Jadue, vice-presidente de la Federación Palestina de Chile, intervino y pidió el rechazo del acuerdo. Sostuvo que la ratificación del acuerdo es una violación del derecho internacional, en beneficio de un país que no respeta los derechos humanos de los palestinos.

“Invito a la reflexión sobre lo que significaría premiar al gobierno de Israel con la apertura del Mercado Latinoamericano a alguien que extermina al pueblo palestino”, dijo Jadue.

Arlene Clemesha, profesora de historia árabe en la Universidad de São Paulo (USP) y parte de la Red de Coordinación sobre Palestina de las Naciones Unidas, se pronunció contra el formulismo de ratificar el acuerdo con la exclusión de los productos de los asentamientos, advirtiendo que es imposible separar la dos, como Israel tiene una historia de comercialización de productos de los asentamientos como los de Israel. En cambio, dijo, el camino hacia la paz requiere de las fuerzas internacionales para obligar a Israel a poner fin a la ocupación militar del territorio palestino.

Los miembros de la comisión parlamentaria estuvieron de acuerdo con Clemesha y Jadue y recomendaron la congelación del acuerdo como un medio de presión política.

"Va a ser una pequeña contribución, pero es específica. El acuerdo sólo puede ser válido si es aprobada por los países del Mercosur. Como el Uruguay ya ha aprobado, vamos a trabajar con Argentina y Paraguay. El gobierno de Lula ha sido valiente y tiene que decir públicamente que el acuerdo está congelado hasta que se reanuden las negociaciones de paz ", dijo Nilson Mourao (PT-AC).

Jamal Juma, coordinador de la Campaña de Lucha Popular Palestina contra el Muro del Apartheid comentó: "Después de años de campaña, estamos muy contentos con esta decisión. Es la mayor víctoria que podíamos tener y solo gracias al decidido apoyo de la sociedad civil en Brasil".

Y continuó: "Esta decisión ha demostrado que los gobiernos democráticos de América Latina son aliados de la justicia y están dispuestos a asumir una posición de principios sobre Palestina, incluso cuando están bajo presión israelí. La delegación de Lieberman ha tratado de atraer a Brasil con la ilusión de que podría convertirse en "mediadores" en la región si se prueba que los intereses israelíes son "imparcial" y respaldados con el TLC. Sin embargo, los políticos brasileños no caen en la trampa".
Juma añadió: "Pedimos ahora a la OLP y la Autoridad Nacional Palestina que garanticen que el'NO' para al TLC será una prioridad de sus políticas regionales en el extranjero".

La lucha contra el TLC no ha terminado, el proyecto seguirá siendo analizado por las comisiones de Desarrollo Económico y Comercio e Industria, y el parlamento. A continuación, se dirigirá al Senado. Sin embargo, la decisión del jueves es poco probable que se invierta y el proceso de ratificación del TLC entre Brasil y el Mercosur se ha convertido en otro instrumento eficaz de presión sobre Israel.

Palestine News Network / Traducción OICP
2009-09-14

miércoles, 16 de septiembre de 2009

BOICOT ¿por qué sólo Elbit?


Amira Hass
Haaretz

La pregunta no es por qué Noruega retiró su inversión de Elbit Systems, sino por qué no lo hizo antes y por qué sólo de esta empresa proveedora de los equipos de control del muro. El país que dio el nombre de su capital a lo que el mundo creyó un proceso de paz, todavía sigue invirtiendo en empresas que participan en la construcción y el desarrollo de las colonias en Cisjordania –el principal escollo que destruye cualquier posibilidad de paz (definición de paz que no tiene nada que ver con un servil agradecimiento de los palestinos a lo que Israel está dispuesto a concederles)-.

En principio, en vez de reprender al embajador noruego, el ministro de Defensa y Exteriores Ehud Barak debió dar las gracias a los ciudadanos noruegos. A través del Fondo Global de Pensiones del gobierno, que invierte las ganancias petroleras en 8.000 empresas de todo el mundo en beneficio de las futuras generaciones noruegas, los ciudadanos continúan siendo socios activos de Israel en las construcciones de Cisjordania.

África Israel” (sus acciones no se vendieron por puras razones económicas), los bancos israelíes que financian a los colonos, una compañía mexicana que posee plantas industriales en las colonias y es socia en la minería en los territorios ocupados, compañías israelíes cuyas plantas están ubicadas en la Cisjordania ocupada, son algunas de las más de 40 empresas israelíes e internacionales que intervienen en la consolidación de la ocupación y se benefician de inversiones del gobierno noruego, según informes de "Who Profits", proyecto auspiciado por la Coalición de Mujeres por la Paz.

El Consejo de Ética del ministerio de Finanzas noruego que recomendó retirar la inversión del Fondo de Pensiones de Elbit, explicó la razón de esa retirado y por qué no se retira, por ejemplo, de la empresa estadounidense Caterpillar. Elbit –dijeron- desarrolló equipamiento utilizado específicamente en la construcción del muro de separación, mientras que los equipos que vende Caterpillar al ejército israelí tienen utilizaciones legítimas y no se puede responsabilizar a la compañía si se usan con fines ilegales (como la destrucción sistemática de viviendas palestinas).

El Consejo extendió sus conclusiones a otras compañías que también se benefician de las inversiones noruegas y están involucradas en la construcción del muro de separación. Esto se debe indirectamente a las actuaciones de activistas noruegos de izquierda junto con activistas israelíes y palestinos que se oponen a la ocupación, con sospechas fundamentadas de que violan las directrices de la guía ética. Dicha guía prohíbe las inversiones en compañías que “contribuyen a graves y sistemáticas violaciones de los derechos humanos” y están en flagrante contradicción con la voluntad o la pretensión de llevar a Israel y a los palestinos hacia un acuerdo justo.

Aún así, parece que el ministerio de Asuntos Exteriores y Barak sabían la razón de la prisa para reprender al embajador e intentar sembrar el temor, una vez más, obligando a Noruega a bajar el listón de las decisiones tomadas para sí misma y para otros países, bloqueando de esta manera el sendero abierto por esas recomendaciones. Es la primera vez que una nación adopta –activamente y no sólo con palabras- la decisión de la Corte Penal Internacional de la Haya sobre el muro de separación, del que el 87% está construido en territorio ocupado, lo que contraviene el derecho internacional.

Si la construcción del muro es ilegal en sí misma, se deduce que también son ilegales las colonias, las carreteras y las fábricas al servicio de la ocupación. La ministra de Finanzas noruega también señaló que la Corte Penal Internacional decretó que los países firmantes de la Cuarta Convención de Ginebra tienen la obligación de evitar la violación sus estatutos.

Se dice que los miembros del Consejo de Ética no están influenciados por presiones sociales o políticas. Pero la propia creación del Consejo, en 2004, se debió a las presiones y luchas públicas. Esperamos que las fuerzas ciudadanas noruegas continúen diciéndole a su gobierno (incluso aunque se produzca un cambio en el mismo hacia una administración más de derecha) que su obligación es no arrastrarlos en la violación de las leyes.

Traducido para Rebelión por J.M. y revisado por Caty R.

TIAA-CREF confirma desinversión en Africa Israel Investments

Por Ora Coren - Ha'aretz
13/09/2009

El fondo de pensiones gigante estadounidense,TIAA-CREF, confirmó en declaraciones a la prensa el viernes que ha desinvertido en Africa Israel Investments, propiedad del multimillonario israelí Lev Leviev, a principios de este año.

Las declaraciones se produjeron en respuesta a una carta iniciada por un grupo pro-palestino, Adalah-NY, y firmada por clientes de TIAA-CREF.

La inversión del Fondo en Africa Israel ascendía a sólo 257.000 dólares, por lo que el efecto financiero de la venta es mínimo. Las noticias de la venta se produjeron cuando la empresa israelí estaba sufriendo una profunda crisis financiera, habiendo anunciado recientemente que no puede cumplir sus compromisos con sus tenedores de bonos.

Adalah NY señaló en su comunicado de prensa que "A pesar de la reciente desinversión en Africa-Israel, el nuevo informe de TIAA-CREF de fecha 30 junio indica que el Fondo sigue invirtiendo dinero de clientes en una serie de empresas que apoyan las actividades de asentamientos israelíes, entre ellas el Israel Discount Bank, Cellcom Israel, Bezeq Israeli Telecommunications Corp, Bank Leumi, y Motorola, entre otros."

A principios de este mes, el gobierno noruego anunció que retiraba la totalidad de sus inversiones en Elbit Systems, que fabrica el sistema de control instalado en varias partes del muro de separación en Cisjordania.

La ministra de Finanzas de Noruega Kristin Halvorsen, dijo que la decisión se basaba en la recomendación del consejo de su ministerio. "No queremos financiar a empresas que contribuyen tan directamente a violaciones del Derecho Humanitario Internacional", declaró Halvorsen según se informa, explicando que el muro de separación inciden en la libertad de circulación de los residentes de Cisjordania

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Comunicado de la red solidaria contra la ocupación de Palestina; Con el apartheid no se juega: Boicot al equipo israelí de la Copa Davis

Con el apartheid y la ocupación no se juega: El Equipo israelí de la Copa Davis no es bienvenido en Murcia

Con motivo de la celebración de la semifinal de la Copa Davis en Murcia los próximos 18 y 19 de septiembre, el presidente de la Federación de Tenis de la Región de Murcia, Antonio García Alarcón, hizo una serie de declaraciones a la prensa en las que se mostraba orgulloso del un dispositivo de seguridad que garantiza el control de acceso al lugar en el que se celebrarán los partidos. Como ha afirmado Pacheco, “el criterio de la seguridad ha sido fundamental para acoger esta ronda dada la especial atención que precisa el equipo visitante".

Según recoge el Diario “La Opinión de Murcia” en su edición del 24 de agosto, “agentes del Mossad (una de las agencias de inteligencia de Israel, responsable de la recopilación de información de inteligencia, acción encubierta, espionaje y contraterrorismo) 'peinarán' la región de Murcia para extremar las medidas y preservar la seguridad de sus tenistas" [1]

“La especial atención que precisa el equipo visitante” si nos ceñimos a la experiencia más reciente, se debe a que el equipo israelí de la Copa Davis, que ejerce la representación del Estado de Israel en tanto selección nacional israelí, no es un equipo bienvenido en nuestro país. La Federación y las autoridades lo saben, blindando el partido ante una ola de protestas que conocen de antemano. E invitando a agentes de seguridad israelíes a peinar Murcia.

El motivo del rechazo, y el porqué las autoridades israelíes reclaman seguridad, en este caso servida por autoridades españolas es debido a la continuidad del proceso de colonización israelí de la tierra Palestina, a la matanza y asedio de Gaza, a la continua expansión de los asentamientos judíos en tierra ocupada, a la construcción del Muro, al encierro de los palestinos en Bantustanes, a la negativa israelí a permitir el ejercicio del derecho al retorno de los millones de refugiados que esperan desde hace décadas en los países vecinos y, como olvidarlo, al sistema de apartheid efectivo en marcha.

¿Va a confiar el Gobierno español al Mossad las competencias de seguridad interna del Estado?. Sin lugar a dudas. Cada vez que el Maccabi de Tel Aviv juega en nuestras canchas, éstas se llenan de agentes israelíes. Si alguien pretende tomar un avión con objetivo de visitar Palestina, agentes de seguridad israelíes serán los encargados de interrogarle, humillarle, incluso desnudarle en instalaciones de Barajas o El Prat y para impedirle finalmente subir al avión. La colaboración entre las cuerpos de seguridad del Estado de España e Israel es habitual. Y en este caso, se anuncia públicamente que agentes israelíes vigilarán en nuestro territorio las manifestaciones de protesta de la sociedad civil organizada contra la presencia del equipo israelí de Tenis en Murcia.

Israel no es bienvenido en Murcia por los mismos motivos por los tampoco fue bienvenido en Suecia en la eliminatoria previa. Los partidos que Israel jugó contra Suecia en Malmoe el pasado mes de marzo tuvieron lugar a puerta cerrada, sin público, en medio de un increíble dispositivo de seguridad mientras miles de personas se manifestaban en las calles contra el partido. Rechazamos la invitación a la selección del apartheid israelí. Rechazamos que se consideren ¡normales' las relaciones deportivas con un Estado ocupante que desprecia las Resoluciones de las Naciones Unidas. Proponemos, por contra, que nuestro Gobierno rectifique y que Israel juegue en Murcia a puerta cerrada para explicitar pública y oficialmente que no se trata de un equipo bienvenido en nuestro país.

Las acciones contra Israel que promueven diversos grupos solidarios, entre ellos la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina, se enmarcan en la Campaña Global de Boicot, Desinversiones y Sanciones contra el Estado de Israel, lanzada ya en 2005 por la sociedad civil palestina y que ha adquirido dimensiones preocupantes para las autoridades israelíes especialmente a partir de la última campaña militar israelí contra Gaza a principios de este año.

La Campaña por el Boicot, las Desinversiones y Sanciones contra el Estado de Israel es una campaña global, no violenta y basada en el enfoque de derechos. Sólo reclama que Israel cumpla el derecho internacional que le compete en cuanto a finalizar con la ocupación militar de palestina, la construcción del muro, el sistema de discriminación racial, el asedio de Gaza y la negativa del derecho al retorno para los refugiados. Mientras esto no suceda, buscará la aplicación de medidas punitivas noviolentas que aumenten la conciencia de la sociedad civil respecto a los crímenes israelíes, manifestándose frente a las Embajadas culturales en el desarrollo de sus funciones. Su equipo nacional de tenis es sólo una de ellas.

Al igual que ha sucedido en anteriores visitas de equipos israelíes al Estado español, los partidos se encontrarán con protestas, siempre noviolentas y basadas en la defensa de los derechos humanos y el derecho internacional que Israel viola desde 1948. No pueden ponerles puertas al mar. No pueden conseguir nada blindando Murcia con agentes de seguridad israelí. Si los partidos tienen que jugarse, la sociedad civil se manifestará, como viene haciendo y como continuará haciendo, en defensa de la legalidad internacional. Como sucedió en Suecia y como sucederá allí donde los representantes del apartheid israelí, bajo su himno y su bandera, traten de lavarle la cara de su Estado, un Estado que debe ser sancionado y presionado a nivel internacional hasta que decida comportarse como una nación civilizada.

Súmense a la Campaña Global por el Boicot, Desinversiones y Sanciones al Estado de Israel, tal y como han propuesto la Sociedad civil Palestina y como ha recogido y multiplicado, hace pocas semanas, el Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas,“Hace veinte años jugamos un papel fundamental cuando nos sumamos a la sociedad civil y decidimos que era necesario aplicar sanciones para presionar de manera noviolenta a Sudáfrica. Hoy deberíamos seguir el ejemplo de una nueva generación de la sociedad civil que convoca una campaña noviolenta similar, para el Boicot, las Desinversiones y las Sanciones que presione a Israel”.

AIC

martes, 8 de septiembre de 2009

Los boicots como legítimos medios de resistencia

Los prejuicios no siempre muestran una cara fea. El sionismo y el racismo no son la excepción: es absolutamente posible que las personas bienintencionadas alberguen un prejuicio y, lo que es todavía peor, actúen a partir de sus prejuicios.

Uri Avnery se opone a la brutalidad infligida a los palestinos, hace campaña por la paz con los palestinos, pero también tiene un pasado sionista. Es europeo de nacimiento y combatió para el Irgun terrorista en la comisión de un holocausto (Nakba) contra los palestinos. Después renunció a las tácticas del Irgun. Se opone a la guerra, pero no está en contra de las consecuencias de la guerra. Aprueba la solución de los dos Estados. En otras palabras, los judíos israelíes conservarán los frutos de haber desposeído a otro pueblo al tiempo que siguen presionando por la devolución de lo que les quitaron.

Avnery aboga por el uso selectivo de tácticas contra el sionismo; así lo evidencia cuando se trata del boicot internacional a Israel. Avnery afirma que nadie puede responder mejor al tema que el arzobispo sudafricano Desmond Tutu.

¿Qué dice Tutu? Ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para tratar a Israel como trató a la Sudáfrica del Apartheid y apoya las campañas de desinversión contra Israel.

Neve Gordon, israelí al igual que Avnery, está de acuerdo en que este es el momento de un boicot. Avnery lamenta “que no pueda estar de acuerdo con él en esta ocasión; ni con la similitud con Sudáfrica ni con la eficacia de un boicot a Israel.”

En realidad, ambos apartheid, si bien similares en muchos aspectos, tienen ciertas diferencias. Gary Zaztman señala una diferencia clave:

Pese a su grave e indudable malevolencia y a los numerosos crímenes contra la humanidad cometidos en su nombre, incluiso masacres, el apartheid sudafricano racista y blanco no formuló la premisa de cometer genocidio. El sionismo, por otra parte, se comprometió con la disolución de la integridad social, cultural política y económica del pueblo palestino, es decir, con cometer genocidio desde sus comienzos, al menos desde el requerimiento de Teodoro Herzl en sus diarios referente a que la “transferencia” de la “paupérrima población” palestina a otro lugar fuera llevada a efecto “discreta y prudentemente”.

Los boicots como táctica contra el racismo

Según Avnery, Tutu dijo: “El boicot fue inmensamente importante, mucho más que la lucha armada”.

Pero fue el revolucionario Nelson Mandela, quien rechazó renunciar al derecho a la lucha armada, el que negoció el desmantelamiento del apartheid sudafricano.

Tutu también le dijo a Avnery: “La importancia del boicot no fue solo económica sino también moral”.

Avnery escribe: “Me parece que la respuesta de Tutu acentúa la enorme diferencia entre la realidad de Sudáfrica en aquel tiempo y la nuestra hoy en día”.

Entonces, ¿qué está diciendo Avnery? Primero afirma que Tutu es la persona más indicada para hablar de la efectividad del boicot como herramienta en la lucha contra el racismo; después, que Tutu está equivocado. Entonces, ¿afirma Avnery que él está mejor cualificado para hablar sobre la efectividad de los boicots contra el racismo?

Avnery teme que los judíos israelíes sientan que todo el mundo está contra ellos.

Sin embargo, ¿no es eso, en cierto sentido, lo que se propone: demostrar que todo el mundo está en contra del racismo judío contra los palestinos? Debe destacarse que el mundo no está en contra de los judíos , como a la propaganda israelí le gusta subrayar. Aunque no lo manifiesta de manera específica, Avnery echa mano de una versión del vilipendio antisemita: si estás en contra de alguna acción de Israel, entonces estás en contra de los israelíes; por tanto, eres un antisemita. Esta grotesca perversión de la moralidad y de la lógica sostiene que estar en contra del racismo hacia los palestinos te convierte en antisemita.

Avnery admite: “En Sudáfrica, el boicot mundial ayudó a fortalecer a la mayoría y la templó para la lucha. El impacto de un boicot a Israel sería exactamente el contrario: empujaría a la inmensa mayoría a los brazos de la extrema derecha y crearía una mentalidad de fortaleza contra el mundo antisemita”. (El boicot, por supuesto, tendría un impacto diferente sobre los palestinos, pero ese no es el objetivo de quienes abogan por él)”.

Avnery se limita a señalar cuál es el actual statu quo. Israel ya está acuclillado en la mentalidad de la fortaleza de la extrema derecha, pero el boicot no es la causa. Avnery insiste en las dinámicas de la población. ¿Cuál es la importancia de las mayorías y minorías en su razonamiento? Parecería que el que los palestinos sean la minoría (y el hecho de que apoyen el boicot) sería incluso una mayor razón para el apoyo internacional al boicot. ¿A quiénes y qué defiende Avnery, a los palestinos del racismo o a los judíos israelíes de los efectos económicos y el estigma moral de un boicot internacional?

Con respecto al objetivo de la campaña de boicot, “negarle a Israel los medios financieros para continuar con la matanza de palestinos y la ocupación de tierras”, Avnery recurre al argumento del Holocausto para afirmar que el sufrimiento está profundamente grabado en el alma judía. Que la caza nazi de judíos en campos de concentración fue una atrocidad moral. Pero, ¿cuál es la lección de la Segunda Guerra Mundial? ¿Que el sufrimiento impuesto a cualquier grupo específico de gente es un horror y un error, o que un grupo puede apropiarse de un holocausto, hacerlo suyo y usar sufrimientos pasados como escudo para infligir un holocausto ulterior a otro pueblo? Avnery afirma que el boicot les recordará a los judíos el nazismo, pero ¿qué les recordarán las técnicas de estilo nazi que ellos mismos usan?

Avnery dice que está bien boicotear los productos de los “asentamientos”. Hace una distinción entre “colonos” (es decir, “colonizadores”) y otros judíos israelíes. Entonces, ¿cómo puede racionalizar el hecho de que los “colonos” estén en Cisjordania?

Avnery afirma: “Quienes llaman a un boicot actúan por desesperación. Y esa es la raíz del asunto”. En efecto, la vida de muchos palestinos bajo la ocupación o en los campos de refugiados no es sino desesperanza.

Avnery dice que sería difícil lograr un boicot internacional y que Estados Unidos no lo respaldaría. Tampoco fue fácil de lograr contra los regímenes del apartheid en Sudáfrica. ¿Es esa una razón para no intentarlo? ¿No se opuso Estados Unidos al boicot a Sudáfrica? Sí, puede llevar mucho tiempo, pero los tiempos cambian. La obstinación de Estados Unidos (y de sus aliados occidentales) fue aplastada en Venezuela, Cuba, Bolivia y otros países. Los imperios se han levantado y caído a lo largo de la historia.

Para Avnery, la táctica del boicot es “un ejemplo de diagnóstico equivocado que lleva a un tratamiento equivocado. Para precisar: el supuesto erróneo de que el conflicto israelí-palestino se asemeja a la experiencia sudafricana conduce a la elección de una estrategia equivocada”.

Además, dice: “En Sudáfrica había un total acuerdo entre las dos partes sobre la unidad del país, la raíz de la lucha era el régimen. Tanto blancos como negros se consideraban sudafricanos y estaban decididos a mantener intacto el país. Los blancos no querían la partición y, ciertamente, no la querían porque su economía se fundamentaba en la mano de obra de los negros”.

Parece que persiste una falla en el análisis. “Los blancos no querían la partición” ¿Cómo puede Avnery afirmar algo tan realmente inexacto? ¿Qué fueron Venda, Lebowa y los bantustanes sino secciones de Sudáfrica subdivididas por el gobierno blanco? Además, el hecho de que el sionismo ya no sea dependiente de la mano de obra palestina no encubre que lo haya sido durante un tiempo. La argumentación de Avnery es autocomplaciente: negar a los palestinos el derecho a trabajar en la Palestina histórica es una táctica que evolucionó del sionismo.

Además, ¿cómo es que Avnery puede polemizar contra un boicot internacional a Israel, cuando el Estado judío mantiene un aplastante e ilegal bloqueo contra los palestinos, un crimen de guerra? Mientras Israel aplique semejante táctica la resistencia a través del boicot será legítima.

Avnery dice que los judíos israelíes y los árabes palestinos no tienen nada en común. Sin embargo, esa falta de elementos comunes es claramente el caso entre los blancos y los negros sudafricanos. No obstante, me opongo a tal argumentación, ya que allana el terreno al racismo. Judíos israelíes, palestinos, negros y blancos sudafricanos; todos son humanos. Todos ellos comen, trabajan, duermen, tienen sueños, tienen familias. Esto debería ser razón para actuar humanamente los unos con los otros: amor a la humanidad. Es completamente posible abrazar nuestra humanidad compartida y respetar la diversidad.

Avnery concluye: “En resumen, los dos conflictos son fundamentalmente diferentes. Por consiguiente, los métodos de lucha también deben ser diferentes”.

La lógica del razonamiento es errónea, al igual que es erróneo, desde la lógica y la moral, suponer que ser víctima de un genocidio minimiza la propia culpabilidad en un genocidio ulterior. Uno sospecha que Avnery bien puede ser la victima de una conciencia dolida y una disonancia cognitiva. Considero que los dos “conflictos” son fundamentalmente similares. Básicamente, el colonialismo israelí y el colonialismo sudafricano comparten ese sello: un grupo de extranjeros racial, cultural, espiritual y lingüísticamente diferentes que mediante una preponderante violencia despojan a otro pueblo de su tierra natal y establecen un sistema de apartheid que humilla a los nativos y privilegia a los ocupantes.

Avnery se centra en ciertos “fundamentos” —los cuales considero que no son fundamentos sino matices — que él considera diferentes. La solución de Avnery radica en el “un amplio y detallado plan de paz” de Barack Obama y “en todo el poder persuasivo de Estados Unidos” para inducir “un camino de paz con Palestina”.

Avnery recuerda bien los anteriores planes de paz respaldados por los Estados Unidos: Oslo y la Hoja de Ruta. ¿Por qué entonces funda su audaz esperanza en el Obama apaciguador del AIPAC? ¿Espera Avnery que los judíos israelíes se den cuenta de que la paz con los palestinos es el camino? Avnery pregona una solución que ha fracasado y que ha sido rechazada muchas veces, al tiempo que rechaza una solución que ha funcionado en Sudáfrica a causa de las sensibilidades de los opresores.

Pero examinemos la lógica de Avnery de que “conflictos” fundamentalmente diferentes exigen luchas diferentes. La opresión se derroca con la lucha. Es posible resolver “conflictos” fundamenta

lmente diferentes con luchas similares. Por ejemplo, los revolucionarios derrocaron una dictadura respaldada por Estados Unidos en Cuba mediante la lucha armada y los revolucionarios cubanos derrotaron en Angola a las fuerzas sudafricanas mediante la lucha armada.

Al final de su artículo, aparentemente asegurando sus propios argumentos sobre la persona que estima como la persona con mayor autoridad en el tema de los boicots como herramienta para vencer el apartheid, Avnery señala una plegaria de Tutu, una plegaria que bien puede ser útil a todos:

“Dios amado, cuando me equivoque, por favor dame la voluntad de ver mi error. Y cuando tenga razón, por favor, hazme soportable para la convivencia”.

Ojalá Avnery se rija por esa humildad cuando vea sus propios errores.

Kim Petersen, traducido para Rebelión por Carlos Sanchis.



Boicot a los embajadores culturales israelies en la Diada


Llamada a la sociedad civil catalana y sus instituciones



La Campaña Palestina por el Boicot Académico y Cultural a Israel (PACBI) saluda a los ciudadanos catalanes, a su gobierno y a su parlamento con ocasión de la Diada, fiesta nacional catalana que se celebra el 11 de septiembre. Mientras vosotros recordáis el valor de los ciudadanos catalanes y de Aragón que resistieron a los monarquía absoluta de los Borbones y conmemoráis el asedio de 1714 sobre Barcelona, os pedimos que no invitéis a embajadores culturales de Israel que defienden y justifican el asedio criminal de la Franja de Gaza, descrito por Richard Falk, Rapporteur especial de derechos humanos en el Territorio Palestino Ocupado como un "crimen contra la humanidad" y un preludio al genocidio".

En un día tan señalado para vuestro país, os convocamos encarecidamente a cancelar la anunciada participación de la cantante israelí Noa en el concierto y acto institucional que se celebrará el próximo 11 de septiembre. Sin ningún sentido de ironía, se espera que Noa interprete "El cant dels ocells," escrito por el maravilloso músico catalán Pau Casals. Cuando la interpretó en Naciones Unidas al recibir la Medalla de la Paz en 1971 Casals dijo:

"No he tocado el chelo en público en años, pero he sentido que había llegado el momento de tocar de nuevo. Voy a tocar una melodía del folklore catalán: "El cant dels ocells". Los pájaros cantan cuando están en el cielo. Cantan "paz, paz, paz" y es una melodía que Bach, Beethoven, y todos los grandes habrán admirado y amado. Es más, ha nacido en el alma de mi pueblo, Cataluña"

El espíritu de libertad y de dignidad humana que Pau Casals expresó entonces con tanta elocuencia, es la negación explícita de los crímenes de guerra que Noa y otros artistas israelíes, cómplices con ellos, defienden y justifican.

En un intercambio de cartas entre Noa y el movimiento catalán por la paz, Aturem la Guerra, Noa demostró su complicidad con la defensa de la guerra de agresión de Israel contra el millón y medio de palestinos que viven en la Franja de Gaza. Noa defendió en público la masacre de Gaza mientras las fuerzas israelíes la bombardeaban, destruyendo parcial o totalmente escuelas, hospitales, ambulancias, y miles de casas de civiles, en lo que las organizaciones de derechos humanos y los expertos han definido como crímenes de guerra. Dirigiéndose a los palestinos de Gaza, Noa escribió:

"Sólo puedo desearos que Israel termine el trabajo que todos necesitamos sea hecho, y que os libre de una vez por todas de ese cáncer, ese virus, ese monstruo llamado fanatismo, llamado Hamas. Y que esos asesinos encuentren la poca compasión que pueda quedar en sus corazones y dejen de usaros a vosotras y a vuestros niños como escudos humanos para su cobardía y sus crímenes"

Cuando les pedimos que cancelen la invitación a Noa no estamos pidiendo que se boicotee a individuos porque sí. Nos referimos a "autodenominados embajadores culturales" de un régimen colonial y de apartheid. Después de que la imagen de Israel en el mundo se haya visto empañada debido a sus crímenes contra Gaza, Israel ha lanzado una campaña "marca Israelí" para lavar su imagen tras las graves violaciones del derecho internacional y promover una imagen engañosa de Israel como país progresista y liberal y no colonial y opresor. El Director general de Asuntos Culturales del Ministerio de Asuntos Exteriores israelí declaró el pasado mes de marzo "enviaremos escritores al extranjero, compañías de teatro, exposiciones. De este modo mostraremos la cara amable de Israel, de modo que no se nos identifique con un estado de guerra permanente" Sean cuales sean esas intenciones, invitar a Noa a cantar en la fiesta nacional de Cataluña se equipararía con la colaboración con esta campaña de imagen israelí.

Las pautas, recientemente publicadas, de PACBI para aplicar el boicot cultural internacional así lo expresan:

La libertad de expresión de los individuos, especialmente de los artistas debe ser respetada. En este contexto, un artista puede ser boicoteado en respuesta a lo que es mayoritariamente concebido como un acto o declaración particularmente ofensivos (tales como una incitación, abierta o indirecta a la violencia, justificación -una forma indirecta de defensa- de crímenes de guerra y otras violaciones graves del derecho internacional. A este nivel, los trabajadores israelíes de la cultura no deberían estar automáticamente exentos de críticas y formas, legales, de protesta ante ellos, incluido el boicot. Deben ser tratados del mismo modo que el resto de personas que violan las normas. Ni mejor ni peor."

Noa debe ser tratada del mismo modo que cualquier artista internacional que defienda crímenes de guerra. Debe ser boicoteada.

Reconociendo y apreciando profundamente la solidaridad que la sociedad civil catalana ha mostrado a lo largo de los últimos años con las legítimas aspiraciones palestinas de justicia y libertad, PACBI le pide a las personas con principios y conciencia en Cataluña que lo confirmen y se sumen a la Campaña Internacional de Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS) contra Israel para terminar con su impunidad criminal. Como ha dicho el Padre Miguel D´Escoto Brockmann, Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas:

Hace veinte años jugamos un papel fundamental cuando nos sumamos a la sociedad civil y decidimos que era necesario aplicar sanciones para presionar de manera noviolenta a Sudáfrica. Hoy deberíamos seguir el ejemplo de una nueva generación de nuestra sociedad civil que está convocando a una campaña noviolenta similar de Boicot, Desinversiones y Sanciones para poner presión sobre Israel.

Creemos que Cataluña puede jugar un papel importante en el desarrollo de mecanismos de presión noviolenta efectivos que fuercen a Israel a cumplir con sus obligaciones ante el derecho internacional, tal y como sucedió en su día con la Sudáfrica del Apartheid. Esperamos sinceramente que Cataluña esté a la altura de su compromiso con los derechos humanos y decida no acoger a ningún embajador cultural israelí.

lunes, 7 de septiembre de 2009

Yael Lerer y Naomi Klein muestra cómo boicotear al régimen de Israel, el mayor boicoteador (entrevista)


En el momento de publicar su ultimo superventas, The Shock Doctrine, en hebreo y árabe, Naomi Klein decidió no firmar un contrato de publicación tradicional, con sus anticipos y sus derechos de autor. En su lugar, donó el libro a Andalus, una editorial que trabaja activamente contra la ocupación. Es el único editor de Israel dedicado exclusivamente a la traducción de textos del árabe al hebreo, algo que su fundador Yael Lerer describe como "la política editorial entendida como un acto de resistencia".

Klein y Lerer también decidieron emprender una gira promocional que hiciese honor a la llamada de los palestinos en favor de un boicot cultural contra Israel, y que a la vez mostrase que el boicot no implica cortar la comunicación y el diálogo, tan necesarios.

El mes pasado, en Tel Aviv, me senté con Klein y Lerer para preguntarles acerca de los objetivos, el significado y los detalles concretos de la aplicación de un boicot cultural, y también por qué Lerer, un judío israelí, está diciendo al mundo: "Por favor, boicotéenme."

He aquí algunos extractos de esa entrevista. - Cecilia Surasky

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Cecilie Surasky: ¿Qué es esta llamada al boicot, la desinversión y las sanciones? ¿Y, por qué la apoyan?

Naomi Klein: Boicot, desinversión y sanciones (BDS) es una táctica con un objetivo muy claro: obligar a Israel a cumplir con el derecho internacional.
La llamada al BDS la hizo en 2005 una serie extraordinariamente amplia de grupos palestinos de la sociedad civil, partidos políticos y sindicatos. Pero en realidad no comienza a ganar un perfil internacional hasta el ataque israelí contra el Líbano en el verano de 2006.

En plena guerra, el escritor John Berger, envió una carta, firmada por muchos artistas conocidos, en su mayoría europeos, declarando su apoyo a la estrategia de boicot. Cuando esta carta se conoció, yo estaba de lleno en la escritura de The Shock Doctrine, y tomé una decisión personal en el momento que salió el libro, de que no haría lo que había hecho con las traducciones al hebreo de mis dos libros anteriores, que fueron publicados por editoriales comerciales bastante tradicionales.

En cambio, pensé hacer lo que John Berger estaba pidiendo, que era encontrar una manera de publicar en hebreo que fuese un apoyo directo a los grupos que trabajan para poner fin a la ocupación. Así es como conocí a Yael, que no tiene nada que ver con el típico editor israelí, y que ha manifestado abiertamente su apoyo al BDS, a un alto costo profesional.

Surasky: Usted debe haber meditado bien esta idea de un boicot cultural. Muchos críticos dirían que cierra la comunicación en lugar de abrirla. ¿Qué le decidió a dar este paso?

Klein: Bueno, tiene que ver con el hecho de que el gobierno israelí utiliza abiertamente la cultura como herramienta militar. Aunque las autoridades israelíes creen que están ganando la guerra real por el territorio, también sienten que el país sufre porque casi todo lo que el mundo oye de la región en las noticias es sobre el conflicto: la militarización, la anarquía, la ocupación y Gaza.

Así que el Ministerio de Asuntos Exteriores puso en marcha una campaña llamada Israel, más allá del conflicto, que incluye el uso de la cultura –películas, libros, artes, turismo y academia– para crear todo tipo de alianzas entre los países occidentales y el Estado de Israel, y para promover la imagen de un país normal y feliz, en lugar de una potencia ocupante agresora. Por esto estamos siempre oyendo hablar de festivales de cine y ferias del libro con un énfasis especial sobre Israel.

Y así, aunque en general estoy totalmente de acuerdo en que la cultura es positiva –los libros son buenos, las películas son algo positivo y la comunicación es maravillosa– tenemos que entender que se trata de una estrategia estatal de cooptación, para hacer una brutal ocupación más aceptable.

Hay otras cosas que también entran en esta categoría: el Estado de Israel tiene una estrategia abierta de meter los derechos de gays y lesbianas y el feminismo en el conflicto, poniendo frente a frente el fundamentalismo de Hamás y el supuesto liberalismo ilustrado de Israel, como otra justificación para el castigo colectivo de los palestinos, obviando el poder y la intolerancia cada vez mayores de los judíos ultraortodoxos. Es una estrategia muy sofisticada.

Esto significa que tenemos que idear estrategias igualmente sofisticadas que defiendan los derechos humanos y la cultura, por una parte, pero que, por otra parte, rechacen todo intento de utilizar nuestro trabajo y nuestros valores para encubrir la fea realidad de la ocupación y la segregación.

Surasky: Usted ha hecho una gira muy distinta de cualquier otra, para la promoción de un libro. Yael Lerer y su editorial, Andalus, publicaron el libro en hebreo. Aparentemente, hay una contradicción inherente a venir a Israel y Palestina y hacer una gira de promoción a la vez que apoya un boicot. Sin embargo, han conseguido ustedes que funcionara. ¿Pueden explicarlo?

Yael Lerer: Andalus ha lidiado con esta contradicción desde el principio. Publicamos los escritores árabes que se oponen a la normalización de la ocupación, igual que nosotros. Siempre tratamos de hallar la manera de enfrentar estas contradicciones.

En realidad, esta es la primera vez que hemos hecho una gira de promoción, porque nuestro modo habitual de hacer frente a estas contradicciones es traducir libros, no celebrar fiestas. Nuestros escritores nunca vienen aquí. Así que aquí hemos tenido este desafío por primera vez.

Hemos hecho el gran lanzamiento de la edición en hebreo no en Tel Aviv sino en Haifa, en un teatro árabe, donde nuestros anfitriones no eran instituciones oficiales israelíes sino instituciones minoritarias palestinas. Como usted sabe, hay una minoría palestina de un 20 por ciento de la población de Israel.

Pero este evento no sólo iba dirigido a esta comunidad: invitamos también a los judíos israelíes a venir. Se podía leer en todas partes, en hebreo: Naomi Klein viene a Haifa, ven a escucharla.

Al mismo tiempo, ha sido importante celebrar los primeros actos relacionados con el Jerusalén Este y Ramallah, con la edición en árabe, y también que, antes de cualquier presentación del libro, Naomi participara en una manifestación en Belén contra el muro de separación.

Así que hablamos con el público israelí en los eventos y a través de los medios de comunicación israelíes. El libro está disponible en hebreo. Pero, al mismo tiempo, expresamos una fuerte posición contra la normalización. No actuamos como si la situación fuera del todo normal.

Klein: Una de las cosas que estamos tratando de manifestar con esta gira es que para una extranjera como yo, sea cual sea la razón por la que decidas venir a Israel, estás haciendo una opción, estás colocándote al lado de una de las partes. Es posible pretender que no es así, pero esto sólo es posible por el éxito de Israel en hacer invisible el conflicto, dentro de una burbuja cuidadosamente construida.

En mi libro hay un largo capítulo sobre Israel y la construcción del Estado de Seguridad Nacional. Se analizan en detalle las empresas que fabrican el muro, las cercas metálicas y los puestos de control de alta tecnología que mantienen a los palestinos de los territorios ocupados en un estado de vigilancia constante.

La eficacia del sector de la seguridad nacional hace posible llegar a ciudades como Tel Aviv y estar casi completamente ajeno a lo que está sucediendo en Ramallah o en Gaza. Este Estado es como una comunidad cerrada gigante. Se ha perfeccionado el arte de construir una burbuja de seguridad, lo que es, en cierto sentido, su marca.

Es una marca que se vende a los judíos de la diáspora como yo. Nos dicen: "Podemos manteneros a salvo, podemos crear, en un mar de enemigos, una burbuja de seguridad para que disfrutes, tengas unas vacaciones de playa maravillosas, puedas ir a festivales de cine y ferias del libro, incluso en el momento en que nosotros bombardeamos de Gaza o convertimos Cisjordania en una cadena de minibantustanes, rodeados de muros y asentamientos en expansión, y de carreteras a las que los palestinos no tienen acceso."

Son las dos caras de una misma moneda: la burbuja de la normalidad, la brutalidad del confinamiento. Así pues, que no es un acto políticamente neutral participar de la burbuja.



Surasky: ¿Y cómo han reaccionado los medios de comunicación israelíes ante esta primera gira de oposición al boicot?

Klein: No muy bien. Una de las contradicciones que estamos enfrentando es que realmente queríamos provocar un debate en Israel, porque mientras el BDS se está discutiendo en Europa y Canadá, es casi invisible dentro de Israel; hay una auténtica censura en torno a esta cuestión.

Una vez manifestada mi posición clara a favor del boicot, en el diario Ha'aretz, muchos medios de comunicación se cerraron para nosotros, lo cual no dice mucho en favor de la amplitud del debate, pero no es en absoluto sorprendente tampoco.

Surasky: ¿Cuál es el objetivo de esta campaña? ¿Qué te gustaría que saliera de todo esto?

Klein: Se basa en la estrategia de Sudáfrica, que la lucha contra el apartheid en Sudáfrica utilizó con gran éxito en la década de 1980. Había boicot académico, boicot cultural y boicot de los consumidores.

Pero la palanca económica realmente fundamental fue la desinversión por parte de universidades y municipios en las empresas que hacían negocios con la Sudáfrica del apartheid. La campaña comenzó a ser demasiado costosa tanto para las empresas de Sudáfrica como para las transnacionales occidentales que tenían inversiones importantes en Sudáfrica.

Cuando escritores y artistas dejen de participar en la estrategia del gobierno israelí de utilizar la cultura para ocultar lo que hay del otro lado del muro de hormigón, los israelíes puede llegar a la conclusión de que dicho muro es una rémora y decidan acabar con él.

Lerer: Estoy completamente de acuerdo. Como ciudadano israelí, estimo necesario el boicot por dos razones.

En primer lugar, quiero que los israelíes sean más conscientes que todo no es normal. No significa nada que muchos israelíes que se consideran de izquierda digan: "Es horrible lo que está ocurriendo en Gaza y en Hebrón", mientras siguen con sus vidas como si tal cosa.

Estas personas van a los espectáculos y los conciertos, son las élites de este país. Son los periodistas que trabajan en los periódicos. Quiero conmoverlos, quiero sacudir estas personas y hacerles entender que no pueden continuar su vida normal cuando los palestinos de Qalqiliya [una ciudad de Cisjordania completamente rodeada por el muro de separación], a sólo 15 minutos de Tel Aviv, viven en una prisión.
La segunda razón por la que me interesa el boicot es porque he perdido la esperanza de crear el cambio desde dentro, que era lo que yo traté de hacer como activista durante muchos años.

Y creo que el boicot es una herramienta no violenta que ya ha demostrado que puede funcionar. Por eso pido: por favor, boicotéenme.

Klein: Yo también pienso que tenemos que ser muy claros: éste es un conflicto extraordinariamente asimétrico donde el Estado de Israel es el mayor boicoteador de todos: la economía de Gaza y Cisjordania ha sido totalmente destruida por el cierre fronterizo.

Además de cerrar las fronteras para que los productores en Gaza no puedan sacar sus frutas y verduras, más de 200 instalaciones industriales en Gaza fueron atacadas durante el ataque, a finales de diciembre y enero. Fue una destrucción sistemática de esa economía, para dar una lección a Gaza por haber votado por Hamás. Así que, el boicot ya está teniendo lugar.

Según entiendo el BDS es una táctica a la que estamos recurriendo a causa de la impunidad israelí. Hay una absoluta falta de voluntad de aplicar el derecho internacional al Estado de Israel. Hamás ha cometido crímenes de guerra, pero hay una respuesta internacional a esos crímenes. Sin embargo, no hay respuesta a los crímenes de guerra israelíes, de una escala exponencialmente mayor.

Estábamos hace poco en Gaza. Lo que realmente me impresionó fue la sensación de choque entre tanta gente por el hecho de que después de los ataques de diciembre-enero, después de que cientos de niños fueran asesinados, la comunidad internacional no ha emprendido ninguna iniciativa para responsabilizar a Israel.

Es decir, se trataba de una muestra de total impunidad y desprecio por el derecho internacional, por las leyes de la guerra, que, por cierto, fueron creadas en respuesta directa a las atrocidades nazis de la Segunda Guerra Mundial. Y, sin embargo, no sólo no hay consecuencias para los crímenes, sino el asedio ilegal de Gaza sigue adelante.

Lo que manifiesta el BDS es que nuestros gobiernos han fracasado, las Naciones Unidas han fracasado, la llamada comunidad internacional es una broma. Tenemos que llenar este vacío.

Surasky: ¿Cómo están respondiendo los israelíes de izquierda a la idea de un boicot?

Lerer: Algo sucedió en la última guerra de Gaza, en enero. Quinientos cuarenta israelíes, entre los cuales había destacados académicos, actores y cineastas, firmaron una petición solicitando la presión internacional sobre Israel.
Un párrafo de dicha petición afirmaba que sólo el boicot ayudó en el caso de Sudáfrica. Todavía no era una llamada directa al boicot, pero fue un paso muy importante. Ahora estamos formando un nuevo grupo de ciudadanos israelíes que apoya el llamamiento palestino al boicot, llamado Boicot desde dentro (BFM, Boycott From Within).

En 2005, tratamos de organizar un grupo de artistas en apoyo del llamamiento palestino al boicot académico y cultural, y fracasamos. La gente nos preguntaba: ¿Cómo podemos boicotearnos a nosotros mismos? Es muy difícil, es demasiado radical. Muchas de estas personas ya han firmado la petición de Gaza, y que se están uniendo a nuestro nuevo grupo Boicot desde dentro.

Ellos entendieron que no se trata de boicotearnos a nosotros mismos, sino de pedir a la comunidad internacional, a nuestros conciudadanos en todo el mundo que actúen: Por favor, ayúdennos con su boicot.

Surasky: Hablemos de ejemplos concretos de otras personas que estén apoyando esta convocatoria.

Klein: La mayoría de los artistas no conocen la llamada al BDS, a pesar de que viene de cientos de grupos palestinos. Estamos trabajando en un contexto en el que las voces palestinas son prácticamente inaudibles en Occidente. Pero sí, algunos cineastas políticamente activos han decidido no participar en festivales de cine israelíes patrocinados por Israel.

Ken Loach se retiró del Melbourne International Film Festival cuando supo que estaba patrocinado por el gobierno israelí. El director de cine canadiense John Greyson retiró una película, magnífica, llamada Fig Trees, del festival de cine gay y lésbico de este año en Tel Aviv.

Más recientemente, los Yes Men escribieron una carta muy atenta al Festival de Cine de Jerusalén, explicando por qué decidieron retirar del festival su nueva película, The Yes Men Save the World.

Y ahora se habla de la organización de un festival de cine pro BDS en Ramallah, una vez más para boicotear lo que se entiende por normalidad y a la vez llevar estas películas allí.

Surasky: Acabo de leer una crítica del BDS según la cual si no se pide el boicot de Corea del Norte, o de Estados Unidos por lo de Afganistán o Irak, entonces la llamada al boicot es antisemita. ¿Cómo se puede abordar esta crítica?

Klein: Yo también la he oído, pero yo no estoy llamando a un boicot de nadie. Estoy respetando un llamamiento a un boicot que han hecho cientos de grupos palestinos.

Creo en el principio de que las personas en circunstancias de opresión tienen derecho a la libre determinación. Eso está en el corazón de esta lucha. Los iraquíes, por lo que yo sé, no han pedido un boicot contra Estados Unidos, aunque sería sin duda su derecho.

Una vez más, la única razón de esto pueda suceder es debido a que las voces palestinas están efectivamente marginadas en la prensa occidental.

Lerer: Pero no sólo eso, los países citados no tienen festivales de cine y Madonna no va a dar un concierto en Corea del Norte.

El problema aquí es que la comunidad internacional trata a Israel como si fuera un estado occidental normal, europeo. Y esta es la base del llamamiento al boicot, la relación especial que tienen las universidades israelíes con universidades europeas y estadounidenses, que las universidades de Zimbabwe no tienen.

Estoy convencido de que Israel no podría continuar la ocupación ni un solo día sin el apoyo de los Estados Unidos y la Unión Europea. La comunidad occidental apoya la ocupación. Como Naomi estaba diciendo, no hacer nada es actuar.

Surasky: Algunos opinan que esto no va a ayudar, que los israelíes se consideran en estado de sitio, que los judíos están en estado de sitio, y que realmente la iniciativa va a hacer a los israelíes menos abiertos a la paz.

Klein: Es inevitable que, al menos en el corto plazo, va a alimentar este sentimiento de sitio en Israel.

Pero no es racional, porque en realidad, lo que estamos tratando es un contexto en el que Israel se ha visto recompensado. Si nos fijamos en estos años clave, desde la elección de Hamás, cuando el sitio de Gaza se hizo completamente brutal e ilegal sin lugar a dudas, el comercio con Israel de hecho ha aumentado sensiblemente. Se han puesto en marcha nuevos acuerdos especiales entre la Unión Europea e Israel, y también con América Latina. El año pasado, las exportaciones israelíes a Canadá aumentaron en un 45 por ciento.

A pesar de que Israel está siendo recompensado por este crimen y se está saliendo con la suya con una violencia extraordinaria, la sensación entre muchos israelíes de estar en estado de sitio está en aumento.

La pregunta es, ¿vamos a fomentar esta irracionalidad? Si es así significará que no hacemos nada, que entregamos voluntariamente las herramientas más efectivas del arsenal no violento.

Israel, a pesar de la abrumadora evidencia en contra, cree que el mundo entero está en contra suyo y que todas las críticas a que se enfrenta son formas de antisemitismo.

Esto es simplemente falso, y como activistas ya no podemos permitir que el complejo de víctima de un país enmascare la victimización real de la población palestina.

AlterNet, . Traducido para Rebelión por S. Seguí. Extractado por La Haine

sábado, 5 de septiembre de 2009

Con el apartheid y la ocupación no se juega: El Equipo israelí de la Copa Davis no es bienvenido en Murcia.

COMUNICADO DE LA RED SOLIDARIA CONTRA LA OCUPACIÓN DE PALESTINA:


Con motivo de la celebración de la semifinal de la Copa Davis en Murcia los próximos 18 y 19 de septiembre, el presidente de la Federación de Tenis de la Región de Murcia, Antonio García Alarcón, hizo una serie de declaraciones a la prensa en las que se mostraba orgulloso del un dispositivo de seguridad que garantiza el control de acceso al lugar en el que se celebrarán los partidos. Como ha afirmado Pacheco, “el criterio de la seguridad ha sido fundamental para acoger esta ronda dada la especial atención que precisa el equipo visitante".



Según recoge el Diario “La Opinión de Murcia” en su edición del 24 de agosto, “agentes del Mossad (una de las agencias de inteligencia de Israel, responsable de la recopilación de información de inteligencia, acción encubierta, espionaje y contraterrorismo) 'peinarán' la región de Murcia para extremar las medidas y preservar la seguridad de sus tenistas”



“La especial atención que precisa el equipo visitante” si nos ceñimos a la experiencia más reciente, se debe a que el equipo israelí de la Copa Davis, que ejerce la representación del Estado de Israel en tanto selección nacional israelí, no es un equipo bienvenido en nuestro país. La Federación y las autoridades lo saben, blindando el partido ante una ola de protestas que conocen de antemano. E invitando a agentes de seguridad israelíes a peinar Murcia.



El motivo del rechazo, y el porqué las autoridades israelíes reclaman seguridad, en este caso servida por autoridades españolas es debido a la continuidad del proceso de colonización israelí de la tierra Palestina, a la matanza y asedio de Gaza, a la continua expansión de los asentamientos judíos en tierra ocupada, a la construcción del Muro, al encierro de los palestinos en Bantustanes, a la negativa israelí a permitir el ejercicio del derecho al retorno de los millones de refugiados que esperan desde hace décadas en los países vecinos y, como olvidarlo, al sistema de apartheid efectivo en marcha.



¿Va a confiar el Gobierno español al Mossad las competencias de seguridad interna del Estado?. Sin lugar a dudas. Cada vez que el Maccabi de Tel Aviv juega en nuestras canchas, éstas se llenan de agentes israelíes. Si alguien pretende tomar un avión con objetivo de visitar Palestina, agentes de seguridad israelíes serán los encargados de interrogarle, humillarle, incluso desnudarle en instalaciones de Barajas o El Prat y para impedirle finalmente subir al avión. La colaboración entre las cuerpos de seguridad del Estado de España e Israel es habitual. Y en este caso, se anuncia públicamente que agentes israelíes vigilarán en nuestro territorio las manifestaciones de protesta de la sociedad civil organizada contra la presencia del equipo israelí de Tenis en Murcia.



Israel no es bienvenido en Murcia por los mismos motivos por los tampoco fue bienvenido en Suecia en la eliminatoria previa. Los partidos que Israel jugó contra Suecia en Malmoe el pasado mes de marzo tuvieron lugar a puerta cerrada, sin público, en medio de un increíble dispositivo de seguridad mientras miles de personas se manifestaban en las calles contra el partido. Rechazamos la invitación a la selección del apartheid israelí. Rechazamos que se consideren ¡normales' las relaciones deportivas con un Estado ocupante que desprecia las Resoluciones de las Naciones Unidas. Proponemos, por contra, que nuestro Gobierno rectifique y que Israel juegue en Murcia a puerta cerrada para explicitar pública y oficialmente que no se trata de un equipo bienvenido en nuestro país.



Las acciones contra Israel que promueven diversos grupos solidarios, entre ellos la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina, se enmarcan en la Campaña Global de Boicot, Desinversiones y Sanciones contra el Estado de Israel, lanzada ya en 2005 por la sociedad civil palestina y que ha adquirido dimensiones preocupantes para las autoridades israelíes especialmente a partir de la última campaña militar israelí contra Gaza a principios de este año.



La Campaña por el Boicot, las Desinversiones y Sanciones contra el Estado de Israel es una campaña global, no violenta y basada en el enfoque de derechos. Sólo reclama que Israel cumpla el derecho internacional que le compete en cuanto a finalizar con la ocupación militar de palestina, la construcción del muro, el sistema de discriminación racial, el asedio de Gaza y la negativa del derecho al retorno para los refugiados. Mientras esto no suceda, buscará la aplicación de medidas punitivas noviolentas que aumenten la conciencia de la sociedad civil respecto a los crímenes israelíes, manifestándose frente a las Embajadas culturales en el desarrollo de sus funciones. Su equipo nacional de tenis es sólo una de ellas.



Al igual que ha sucedido en anteriores visitas de equipos israelíes al Estado español, los partidos se encontrarán con protestas, siempre noviolentas y basadas en la defensa de los derechos humanos y el derecho internacional que Israel viola desde 1948. No pueden ponerles puertas al mar. No pueden conseguir nada blindando Murcia con agentes de seguridad israelí. Si los partidos tienen que jugarse, la sociedad civil se manifestará, como viene haciendo y como continuará haciendo, en defensa de la legalidad internacional. Como sucedió en Suecia y como sucederá allí donde los representantes del apartheid israelí, bajo su himno y su bandera, traten de lavarle la cara de su Estado, un Estado que debe ser sancionado y presionado a nivel internacional hasta que decida comportarse como una nación civilizada.



Súmense a la Campaña Global por el Boicot, Desinversiones y Sanciones al Estado de Israel, tal y como han propuesto la Sociedad civil Palestina y como ha recogido y multiplicado, hace pocas semanas, el Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas,“Hace veinte años jugamos un papel fundamental cuando nos sumamos a la sociedad civil y decidimos que era necesario aplicar sanciones para presionar de manera noviolenta a Sudáfrica. Hoy deberíamos seguir el ejemplo de una nueva generación de la sociedad civil que convoca una campaña noviolenta similar, para el Boicot, las Desinversiones y las Sanciones que presione a Israel”.

fUENTE: Palestina.cat

viernes, 4 de septiembre de 2009

Inversiones en el mercado israelí de la Caja de Pensiones del Gobierno Noruego

La Caja de Pensiones del Gobierno Noruego es la fundación de inversiones más grande de Europa. Es una fundación pública con estrictas directrices éticas. De acuerdo con las directrices de la fundación, “no deben hacerse inversiones que constituyan un riesgo inaceptable en el que el Fondo pueda contribuir en actos no éticos u omisiones, como la violación de principios humanitarios fundamentales, serias violaciones de derechos humanos, gran corrupción o severos daños medioambientales”.

En 2008, la Fundación anunció que iba a iniciar una inversión en el mercado israelí. Examinando la cartera de inversiones el 31 de diciembre de 2008, descubrimos que hay una lista con docenas de empresas cuyas actividades han apoyado y mantenido de forma continua la ocupación israelí. Casi los dos tercios de las 41 compañías israelíes de la lista, junto con once compañías internacionales, tienen significativos intereses económicos en la continuidad de la ocupación israelí.

Algunas de las actividades de estas compañías suponen una clara violación de los derechos humanos internacionales y del Derecho Humanitario. Estas compañías construyen asentamientos israelíes ilegales en los territorios palestinos ocupados o amplían los servicios vitales a ellos; proporcionándoles equipamientos especialmente diseñado para la vigilancia y represión de la población civil palestina a través de restricciones de circulación y de castigos colectivos; o tomando parte de la explotación de los recursos palestinos naturales no renovables, para las necesidades del mercado israelí.





Muro de segregación que Israel construye ilegalmente en territorio palestino









A continuación hay una lista alfabética de las empresas israelíes e internacionales de la cartera de inversiones de la Caja de Pensiones Noruega que están implicadas en la ocupación israelí de acuerdo con nuestra base de datos online www.whoprofits.org

África Israel (Israel)- Implicada en la construcción y venta de proyectos de vivienda, infraestructuras y apartamentos en varios asentamientos israelíes de Cisjordania, a través de la filial Danya Cebus y por medio de agencias inmobiliarias de la red anglosajona.

Alstom (Francia) - A través de su filial israelí Citadis Israel - construir la Proyecto de tren ligero de Jerusalén, que está diseñado para conectar los asentamientos israelíes con Jerusalén.

Assa Abloy (Suecia) - propios Mul-T-Lock, un israelí bloquea la empresa con una fábrica en un asentamiento en la zona industrial de Cisjordania.

Banco Hapoalim (Israel) - Proporcionar los préstamos hipotecarios para la construcción de viviendas en los asentamientos de Cisjordania y tiene varias sucursales en los territorios ocupados.

Banco Leumi (Israel) - Proporciona los préstamos hipotecarios para la construcción de viviendas en los asentamientos de Cisjordania y tiene varias sucursales en el territorio ocupado.

Bezeq Israel Telecomunicaciones (Israel) - Construir la infraestructura de telecomunicaciones en Cisjordania y la prestación de servicios a todos los asentamientos israelíes allí.

Caterpillar (EE.UU.) - Su específicamente diseños militares de excavadoras D9 se utilizan por el ejército israelí como armas contra la población palestina y los bienes. Las herramientas de la empresa se han utilizado en la demolición de las casas palestinas de los territorios ocupados y en la construcción del muro de separación y asentamientos en tierra palestina.

Cellcom Israel (Israel) – Ha construido cerca de un centenar de antenas y instalaciones de telecomunicaciones en la tierra ocupada de Cisjordania y las Alturas del Golán para el uso de los colonos israelíes

Cemex (México) – A través de Readymix Industries (Israel) – es dueña de tres plantas en los territorios ocupados de Cisjordania, proporcionar elementos concretos para los diversos los proyectos de construcción en los territorios ocupados de Cisjordania, y acompaña a los israelíes a una cantera de los áridos en Cisjordania. Estos agregados se utilizan para la industria israelí de la construcción. Por lo tanto, la empresa es cómplice de la explotación de los recursos naturales no renovables palestinos en beneficio de la potencia ocupante.

Clal Group (Israel) – Un importante accionista de empresas de cemento Nesher Israel, que proporciona cemento para la construcción del muro de separación, los asentamientos israelíes y las infraestructuras de Cisjordania. Otra filial es Golf & Co, una tienda que tiene una sucursal en el asentamiento de Pisgat Zeev, en la Cisjordania ocupada.

CRH (Ireland)– Mantiene en 25% de Nesher Israel Cement Enterprises, que proporciona cemento para la construcción del muro de separación, los pasos de control y las construcciones de asentamientos en los territorios ocupados de Cisjordania.

Delek Group (Israel) – A través de su filial, Israel Delek de combustible, tiene más de una docena de estaciones de combustible y las tiendas de conveniencia (“Menta") en los asentamientos en Cisjordania.

Dexia (Belgium) – A través de su filial, Dexia Israel, proporcionan a largo plazo préstamos y servicios financieros a los municipios de los asentamientos israelíes en de Cisjordania.

Elbit Systems (Israel) – Es uno de los principales subcontratistas en los sistemas de detección electrónica en la valla de separación y la barrera del Ministerio israelí de Defensa. La empresa también desarrolla y suministra UAV (aviones no tripulados) al ejército israelí, que se utilizan para los ataques militares, civiles y de vigilancia y en los asesinatos selectivos en Gaza y Cisjordania. (nota: recientemente el Fondo Noruego de Inversiones se desprendió de Elbit Systems por cuestiones éticas
Emblaze (Israel) – A través de su filial, Formula Systems, que es propietaria de Matrix, opera con un centro de servicios de shftware en los asentamientos de Cisjordania.

Frutarom Industries (Israel) – Es propietaria de la plantación de aditivos alimenticios en Mishor Edomin, en los asentamientos de la zona industrial de Cisjordania.
G4S (UK) – A través de sus filiales israelíes, Hashmira, proporciona equipamiento de escaneo en los puestos de control y en las terminales de Gaza y Cisjordania.

General Mills (EE.UU.) - Uno de las planta de producción de sus productos es Shalgal, que está ubicada en un asentamiento israelí en los territorios ocupados de Cisjordania.

Gilat Satellite Networks (Israel) - Proporcionar la infraestructura de red de satélite a las instalaciones militares israelíes y los puestos de control en Cisjordania.

HeidelbergCement (Alemania) - A través de Hanson Israel – que tiene tres plantas propias en los asentamientos israelíes de Cisjordania y una cantera de áridos en los territorios ocupados también en Cisjordania. Estos agregados se utilizan en la industria de la construcción de Israel ... Por lo tanto, la empresa es cómplice de la explotación no renovable de los recursos naturales palestinos en la beneficio de la potencia ocupante.

Vivienda y Construcción Holdings (Israel) - A través de sus filiales Solel Boneh y Shikun Ovdim - construye proyectos de vivienda en muchos asentamientos en Cisjordania. La empresa también es un importante accionista de Otzma Pereg (80%), una fábrica de sistemas de aire acondicionado que se encuentra en una zona industrial en los territorios ocupados de Cisjordania.

Israel Discount Bank (Israel) - Proporcionar los préstamos hipotecarios para la construcción de viviendas en los asentamientos de Cisjordania, y tiene varias sucursales en los territorios ocupados. El banco también financia la construcción de algunos de los proyectos de construcción en los asentamientos en Cisjordania.

Israel Electric Company (Israel) - Dispone de un monopolio parcial sobre el suministro de electricidad a Gaza, que ha sido utilizado por el gobierno israelí en la reducción de la fuente de alimentación para presionar a la población de Gaza. La empresa también construye y mantiene infraestructuras en los territorios ocupados de Cisjordania, y proporciona los servicios de electricidad a todos los asentamientos israelíes allí.

Economía Jerusalén (Israel) - Desarrolla y alquila espacios industriales y comerciales israelíes en los territorios ocupados, directamente a través de su filial industrial Edificios Corporation.

Koor Industries
(Israel) - A través de su filial Industrias Makhteshim-Agan controlan parte (25%) de Fibertech, una fibra de vidrio, planta que se encuentra en los asentamientos israelíes en los territorios ocupados de Cisjordania.
Makhteshim-Agan Industries (Israel) – Constrola parcialmente (25%) Fibertech, una fibra de vidrio, planta que se encuentra en un asentamiento israelí en los territorios ocupados de Cisjordania.

Mizrahi Tefahot Bank (Israel) - Proporcionar los préstamos hipotecarios para la construcción de viviendas en los asentamientos de Cisjordania, y tiene varias sucursales en los territorios ocupados.

Socio de Comunicaciones (Israel) - han erigido más de ochenta antenas e instalaciones de infraestructura de telecomunicaciones en la tierra ocupada Cisjordania y en los Altos del Golán para el uso de los colonos israelíes.

Petróleo Paz (Israel) - Dispone de un monopolio sobre el suministro de petróleo a la Autoridad Palestina de Cisjordania. Asimismo, posee y opera con estaciones de gas en los asentamientos de Cisjordania. Su filial PazGas suministra gas GLP a los asentamientos en Cisjordania.
Shufersal (Israel) – La compañía y sus filiales tienen sucursales en varios asentamientos de Cisjordania. También distribuir legumbres y arroz, bajo su propia marca exclusiva de alimentos envasados, Maya Foods, una fábrica situada en un asentamiento israelí de los territorios ocupados de Cisjordania.

Veolia Environnement (France) – Opera líneas regulares de autobuses en los asentamientos israelíes, en las carreteras israelíes de Cisjordania. Además, la empresa ha sido contratada para desarrollar el proyecto de un tren ligero en Jerusalén, que está diseñado para conectar a israelíes con los asentamientos de Jerusalén (nota:aunque finalmente debido a la campaña BDS acabo retirandose). A través de su filial Veolia Servicios Ambientales (Israel), que poseen y operan el vertido de residuos de Tovlan, en la zona ocupada del valle del Jordán, utilizando los recursos naturales capturados de los palestinos para las necesidades de asentamientos israelíes.

Unilever (Netherlands) – Control (51%) la empresa Beigel y Beigel, que es una fábrica de productos de panadería en un asentamiento israelí en la zona industrial de los territorios ocupados de Cisjordania.

Fuente: LEFRIG
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