La esperada lista del año 2009 del todopoderoso -y polémico- gurú del vino estadounidense Robert Parker está encabezada, con 99 puntos sobre 100, por el Pingus 2006, un Ribera del Duero de una añada difícil que elabora Peter Sisseck. En este caso llueve sobre mojado, ya que este vino, en su añada 2005, obtuvo la misma puntuación y con la de 2004 consiguió un 100 sobre 100. Un vino perfecto.

La publicación de esta lista en el Wine Advocate, la revista de Parker, incluye además dos vinos con 98 puntos, el Bierzo Raúl Pérez El Pecado y el Vega Sicilia Único reserva Especial, que también estuvo en la cúspide en la publicación de 2008, mientras que con 97 se sitúa otro vino de Pérez, el A Trabe Red 2006, el Pesus 2005 de Hermanos Sastre (Ribera) y el Malleolus de Sancho Martín 2006 de Emilio Moro (Ribera).

En la lista de los vinos que han pasado de 95 puntos sólo hay un blanco, La Claudina 2007, un godello del Bierzo que nace con esta añada y que firma también Raúl Pérez.

Parker es el crítico de vinos con mayor influencia a nivel mundial y las puntuaciones de este catador abren más mercados y consolidan más ventas que cualquier otra acción comercial, independientemente de su envergadura. Una puntuación elevada (cada vez tiene que ser más alta, antes valía con pasar de 90 puntos y ahora parece que hay que superar los 95) en su lista garantiza a las bodegas el éxito comercial, de ahí la importancia que los elaboradores condecen a su criterio.

En sus últimas publicaciones, el catador ha ido constatando la calidad de los vinos de Castilla y León. De hecho, de los 41 vinos españoles que han superado los 95 puntos en su lista de 2009, casi la mitad son de la Región, y la mayor parte (doce) corresponden a la Ribera del Duero, aunque también ha reconocido en esta ocasión tres vinos del Bierzo, uno de Tierra de León (de Raúl Pérez) y dos Vinos de la Tierra de Castilla y León que firma el enólogo Eduardo García: el Ramiro�s 2005, un vino elaborado con uvas de todo el valle del Duero, y el Mauro Terreus 2004.